Al Celta no le ha acompañado la fortuna en el sorteo de los dieciseisavos de final de la UEFA Europa League (UEL). El equipo de Eduardo Berizzo ha quedado emparejado con el Shakhtar Donetsk, que acabó invicto la fase de grupos y está a punto de conquistar la Liga ucraniana. Se repite así el mismo emparejamiento que en la temporada 2000-2001. En aquella ocasión, los célticos superaron a los mineros gracias a un gol de Catanha en Balaídos.

Aparte de quedar emparejado con un buen equipo, que cuenta con ocho brasileños y el internacional croata Darijo Srna, el conjunto vigués tendrá que realizar un largo desplazamiento (3.400 kilómetros) y afrontar los rigores del duro invierno del este europeo.

El partido de ida se disputará el jueves 16 de febrero en Vigo (19.00 horas) y una semana después será el de vuelta. El lugar de este segundo encuentro está pendiente de decidir. La UEFA no lo anunciará hasta enero, pero lo más probable es que sea en el estadio Arena Lviv de Leópolis, ciudad próxima a la frontera polaca. Ahí juega habitualmente el Shakhtar desde 2014 debido al conflicto armado en el este de Ucrania. El Donbass Arena, su estadio, se encuentra a 1.200 kilómetros al este de la ciudad que perteneció a Polonia hasta 1945. De esa forma, el Celta se ahorrará un millar de kilómetros en su viaje.

Tras superar el pasado jueves la fase de grupos con su triunfo en Atenas frente al Panathinaikos, el Celta confiaba en que el sorteo de ayer en Nyon le deparase una eliminatoria complicada en lo deportivo pero que no exigiese un viaje al otro extremo del continente. El club gallego tenía asumido que le correspondería un difícil rival, dado el nivel de los cabezas de serie. Y así fue, el Shakhtar finalizó primero del Grupo H, después de ganar los seis partidos y marcar 21 goles, más que nadie en esa fase, en la que se midió a Gent, Braga y Konyaspor.

En el club portugués destacó el actual entrenador del equipo ucraniano, Paulo Fonseca. Con el equipo de Braga ganó la Copa lusa y se clasificó para los cuartos de final de la Europa League pasada. Cayó ante el Shakhtar, que no dudó en contratar al técnico luso de 43 años al concluir la temporada. En su plantilla cuenta con futbolistas como Darijo Srna. El lateral derecho croata, de 34 años, suena como refuerzo del Barcelona, como ayer apuntaba la prensa catalana. También destacan los ucranianos Koralenko, Rakitski y Gladky o los brasileños Fred, Marlos, Taison, Bernard, Dentinho, Ismaily y Eduardo, nacionalizado croata.

En su palmarés destaca el título de la Europa League que conquistó en 2009, ante el Werder Bremen (2-1).

La guerra civil ha provocado que sus jugadores extranjeros residan en Kiev, a mitad de camino entre Donetsk y Leópolis, alejados del conflicto armado.

Un detalle importante en esta eliminatoria es que la liga ucraniana concluye este mes y la siguiente no comenzará hasta mediados de febrero. De hecho, el Shakhtar retomará la competición oficial el 16 de febrero en Balaídos. Durante las semanas previas, el equipo ucraniano se concentrará en Portugal, después de hacerlo los últimos años en la costa mediterránea española.

Aunque han mejorado la planificación de la temporada, a los equipos del este europeo les cuesta recuperar el ritmo de la alta competición por ese parón invernal. La temporada del Shakhtar es inmejorable, hasta el momento, pues está a punto de ganar la Liga ucraniana sin haber perdido un partido y pasó invicto la fase dela UEL.

Al Celta, en cambio, le espera un calendario cargado en enero y en febrero. En el segundo mes de 2017, los de Berizzo jugarán ante Real Madrid, Atlético, Osasuna y Sporting, en Liga, aparte de los dos partidos ante los ucranianos.

Athletic Club de Bilbao y Villarreal, los otros dos equipos españoles en esta competición, jugarán los dieciseisavos de final contra el Apoel de Nicosia, en el que juega el excéltico Roberto Lago, y el Roma, respectivamente. Al Ajax, primer clasificado en el grupo del Celta, le correspondió el Legia polaco.