La baja de Iago Aspas, sancionado con un partido de suspensión por acumulación de cinco amonestaciones, y la previsible ausencia de Fabián Orellana, que se ha resentido de su esguince en el tobillo izquierdo durante la concentración con la selección de Chile, van a obligar a Eduardo Berizzo a recomponer su ataque para medirse este sábado al Eibar en Ipurua, donde el Celta se propone encadenar dos victorias tras doblegar antes del parón de Liga al Valencia en Balaídos (2-1).
Será la primera vez esta temporada que el preparador celeste no va a poder contar con su delantero más efectivo, que ayer debutó en Wembley como internacional absoluto, con el agravante de que seguramente tampoco va a disponer de Orellana, su hombre más desequilibrante, aunque éste ya faltó durante cuatro partidos por otra lesión muscular que se produjo a principio de temporada mientras se encontraba con Chile.
El Celta no ha disputado hasta la fecha un solo partido de Liga sin ninguno de los dos sobre el terreno de juego, aunque Aspas fue suplente en el Santiago Bernabéu, por decisión técnica. Y con el pase a la siguiente ronda de la UEFA Europa League en juego a la vuelta de la esquina, con la visita a Balaídos del Standard de Lieja el próximo día 24, es muy probable que Berizzo reserve a Orellana, aun en el caso de que éste estuviese en condiciones de afrontar el partido.
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Pero la primera de las dudas que debe resolver el preparador celeste es quién va a sustituir a Iago Aspas en la posición de nueve. Las opciones naturales son el sueco John Guidetti y el italiano Guiseppe Rossi. El punta escandinavo parece la opción más plausible tras el solvente encuentro, con golazo incluido, firmado en la última jornada ante el Valencia, un partido en el que Berizzo utilizó un "doble nueve" con Aspas arrimado al costado derecho. Por las características de ambos puntas, menos versátiles que el moañés, parece improbable que el entrenador celeste repita la experiencia y opte por uno de sus dos delanteros. A Guidetti, que también anotó en el Amsterdam Arena en el reciente compromiso europeo ante el Ajax, le favorece su buen momento y el hecho de que Rossi no haya sido titular en ninguno de los once compromisos ligueros disputados hasta la fecha.
Claro que siempre hay una primera vez y el artillero italiano es uno de estos futbolistas que no necesitan gran cosa para marcar. El transalpino ha sido bendecido con el don del gol y, aunque su estado físico le ha impedido en los últimos años lucir en todo su esplendor, su instinto depredatorio permanece intacto. Rossi es de hecho el futbolista del plantel con mejor porcentaje goleador en relación a minutos jugados, un tanto cada 133 minutos, por los 282 de Sisto, los 245 de Guidetti, los 197 de Orellana o los 197 de Iago Aspas.
El italiano cuenta también con la ventaja de no haber disputado minutos estas últimas semanas con la selección y llega al choque de Ipurua más fresco que Guidetti, que fue titular con Suecia en el duelo de clasificación para el Mundial que el combinado nórdico perdió el pasado viernes ante Francia (2-1) y disputó 16 minutos en el amistoso que su selección ganó anoche a Hungría (0-2).
El otro gran dilema al que se enfrenta Berizzo es quién va a cubrir la previsible baja de Orellana en la banda derecha. Pione Sisto o Señé, pero principalmente el danés es, sobre el papel, el que cuenta con mayores opciones, lo que devolvería a Theo Bongonda a la titularidad en el flanco izquierdo tras ser suplente en el último partido. En este sentido, resulta significativo que, pese a no haberse estrenado aún como goleador, el extremo belga ha sido titular en diez de los once partidos de Liga. Lo más probable es que Berizzo recurra en Ipurua a su esquema más utilizado, el 4-3-3, especialmente si se confirma la baja de Orellana, el único media punta natural del que dispone el técnico. En este caso, Pablo Hernández o Daniel Wass serán los encargados de jugar por detrás del trío de delanteros, como ha venido siendo habitual a lo largo del curso.
Si en ataque a Berizzo se le presenta el problema de tener que elegir por defecto, en defensa el técnico se enfrenta al dilema de escoger por exceso, pues recupera a Sergi Gómez y a Hugo Mallo, que no pudieron jugar ante el Valencia por sanción, así como a Gustavo Cabral, ausente también, por motivos personales, en el duelo ante los de Cesare Prandelli.
Seis defensores, incluido Fontás, que ya ha dejado atrás su lesión y está listo para competir en igualdad, se disputan cuatro puestos en defensa. En la decisión del técnico influirán muy probablemente el cansancio que los internacionales puedan arrastrar de sus selecciones y la necesidad de dosificar el esfuerzo pensando en el decisivo partido europeo de la próxima semana
