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Celta

Casting de mediocentros

Berizzo maneja las opciones de Mallo y Fontás como pivotes defensivos, ante el exceso de trabajo para Radoja - El serbio, único que se ajusta al perfil que busca el técnico

Andreu Fontás y Hugo Mallo se ejercitan durante un entrenamiento del Celta en A Madroa. // Ricardo Grobas

La polivalencia es un rasgo característico del Celta y en esa búsqueda para optimizar al máximo los recursos disponibles continúa enfrascado Eduardo Berizzo. El técnico argentino considera imprescindible ahora mismo a un futbolista como Nemanja Radoja. El internacional serbio ha entendido como nadie el rol de medio centro defensivo (MCD) que quiere el técnico, quien reclama funciones específicas en ese puesto como la de ejercer de tercer central cuando los laterales se incorporan al juego ofensivo o si el rival ataca con dos delanteros. El chileno Marcelo Díaz llegó a Vigo para ejercer como pivote defensivo, pero sus continuos problemas musculares le han apartado de la titularidad y de poder ejercer una función que exige un gran desgaste físico. Por ello, Berizzo ha iniciado la reconversión de un defensa para contar con un sustituto de garantías cuando Radoja esté ausente. Hugo Mallo y Andreu Fontás son los que han estrenado el cásting el miércoles pasado ante el Sporting de Braga.

Radoja ha entendido como nadie ese papel de MCD que le asignó Berizzo, por lo que esta temporada se ha convertido en uno de los fijos en las alineaciones del Celta. Es más, el balcánico es uno de los futbolistas que excede el plan de rotaciones que diseñó el cuerpo técnico para repartir los esfuerzos entre la plantilla para que el equipo mantenga un nivel físico similar durante toda la temporada.

El internacional serbio acumula 1.055 minutos de juego y ha sido titular en los últimos nueve partidos del Celta, incluidos los dos de la UEFA Europa League (UEL) ante el Ajax. Solamente se perdió el primero de LaLiga, contra el Leganés, por problemas físicos, y el de la UEL frente al Panathinaikos por decisión técnica. Berizzo decidió darle descanso en el duelo ante los griegos. Sus compromisos con la selección absoluta de Serbia tampoco le conceden un respiro durante los parones ligueros, como el actual.

Ahora, el técnico ha aprovechado el paréntesis de LaLiga por los compromisos de las selecciones para buscar remedios a una plantilla numerosa pero desequilibrada en algunas posiciones. Al analizar esas situaciones, tanto el club como el entrenador coinciden, al menos públicamente, en valorar la polivalencia de la plantilla. No obstante, el Celta inició la temporada sin el mediapunta que solicitaba el técnico y las circunstancias le impiden contar con un pivote defensivo similar a Radoja.

El balcánico es el punto de referencia de un centro del campo muy consistente, que completan Pablo Hernández y Daniel Wass. Para el chileno y el danés, Berizzo sí dispone de piezas de recambio en la plantilla. Una de ellas es Marcelo Díaz, un futbolista que dejó el Hamburgo alemán para fichar por el Celta, que en enero pasado se quedó sin Augusto Fernández. El argentino fue un éxito del plan de reconversión de Berizzo, que encontró en el argentino el sustituto perfecto de Krohn-Dehli.

El Chelo Díaz continúa siendo la referencia como pivote defensivo en la selección chilena. Sin embargo, en el Celta ha perdido presencia en esa posición y Berizzo prefiere concederle mayor libertad. Últimamente en Vigo, el internacional con La Roja suramericana solo ejerce como MCD en las rectas finales de los partidos, nunca como titular. Aparece en el campo cuando el equipo celeste necesita más caudal ofensivo que defensivo, con marcadores en contra o ajustados.

En el primer cuarto de la temporada, Radoja ha sido titular indiscutible cuando el Celta ha afrontado los compromisos más exigentes. Su rendimiento ha merecido halagos casi unánimes y se ha visto recompensado con el estreno en las convocatorias de la selección absoluta de Serbia, en la que podría debutar estos días.

Berizzo ha visto en Mallo un posible recambio para Radoja. El lateral ha frecuentado la posición de medio defensivo en algunos partidos amistosos. El último fue el miércoles, en el Memorial Quinocho. Jugó setenta minutos. Después entró en su lugar Andreu Fontás, quien en el Barcelona B jugó muchas veces como pivote defensivo.

Pero Berizzo insiste más en Mallo, al que el curso pasado utilizó también como central. En ese puesto había jugado el capitán del Celta en su etapa de formación. Ahora, el técnico argentino quiere que se adapte al centro del campo y que se incruste entre los centrales cuando el partido lo requiera, como hace Radoja. En ese cásting de mediocentros está centrado ahora Berizzo.

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