Lo más importante ayer para los vigueses fue que cumplieron su objetivo, que no era otro que traerse los tres puntos de su desplazamiento a Palencia. Al mismo tiempo, los de Penedo siguen mejorando en su juego, lo que les ha permitido sumar dos victorias seguidas, lo que imprim mucha seguridad de cara al siguiente enfrentamiento, que será la próxima semana en Tenerife ante uno de los aspirantes al ascenso, el Arona. Regresa la expedición viguesa después de cumplir su objetivo, aunque haya sido contra el colista.

El primer set comenzó con mucha igualdad en el marcador y si alguno de los dos equipos se iba en el marcador ese era el local, pero no lo hacía con facilidad ya que la máxima diferencia no llegó más que a los dos puntos 8-6. Fueron los visitantes los que, paso a paso, iban mandando en el juego y si bien no se despegaban si fueron capaces de igualar el marcador a 12 puntos. De esta forma los vigueses fueron capaces de ponerse, por primera vez en el set, por delante lo que hizo que aumentasen y mejorasen su rendimiento. El set acabó con un relajado 20-25.

En el comienzo del segundo set los vigueses comenzaron mandando en el marcador, 4-7, pero comenzaron los nervios y la inseguridad. De esta forma los locales igualaron y llegaron a ponerse por delante 14-12. La última ventaja de los locales fue la de 18-16. Un tiempo muerto de Suso Penedo y un toque de atención a sus jugadores sirvió para que mejorasen sus bloqueos.

El tercer set sirvió para que los visitantes se asentasen más y mejor en el campo y no dejasen reaccionar a sus rivales. Desde el incio los vigueses se fueron en el marcador para alcanzar un tanteo en un 10-20 que casi daba por finalizado el set y como consecuencia el partido.