"Esta carrera siempre es exigente", indica el ourensano tras proclamarse vencedor absoluto. "Tiene tres o cuatro subidas bastante duras y en la zona del puerto un par de rampas", añade. "Esta semana entrené fuerte, no había bajado el ritmo de los entrenamientos y me encontré un poco atascado, pero me tomé esta prueba era un entrenamiento más. Iba buscando un ritmo en el que no me fuese muriendo, pero sin encontrarme del todo cómodo. Fue para mí un entrenamiento exigente y al final creo que ha salido bien y estoy contento", analiza.

"La carrera nunca es tuya hasta que cruzas la meta, pero iba viendo el ritmo que llevaba y viendo la ventaja que llevaba iba calculando", indicó sobre la carrera. "Tampoco es que mirara mucho para atrás. Salí a mi ritmo, sin importarme los demás y creo que a los 500 metros ya iba solo".

Tras las carreras de Santiago y la San Martiño, sus retos más inmediatos, empezará a a preparar el campeonato de España de medio maratón. "Quiero preparar el campeonato de España; medias ya he corrido varias, pero en el Nacional tengo una espinita clavada porque un año fui quinto, otro cuarto, dos veces me tuve que retirar por problemas físicos. La verdad es que nunca he sido capaz de rendir al nivel esperado en los campeonatos de España de media maratón y espero que este año por fin pueda conseguirlo", anuncia.