La operación en el hombro de Cecilia Cacheda le ha obligado a hacer horas extras durante el verano. La central del Godoy Maceira Bm. Porriño ha trabajo duro para acortar los plazos de recuperación, que en un principio fijaban su regreso a las canchas para octubre. "La verdad es que tengo claro que aún no estoy al cien por cien. Aún no tengo toda la fuerza que debiera y la verdad es que tengo ahora bastante dolor después del partido del sábado", dice la jugadora, que en la primera jornada de la competición ya pudo disputar sus primeros minutos ante el KH7 Granollers, en el que las pupilas de Abel Estévez se impusieron por un ajustado 24-23.

"Lo cierto es que la recuperación ha ido bastante más rápido de lo que se preveía", indica la dezana. "Hemos trabajado muy duro durante todo el verano para que la recuperación haya ido bien e ir acortando plazos", añade.

Aunque también quiere ser cauta y no caer en la precipitación. "Lo hablaba con el fisio. En un hombro la recuperación es delicada y siempre puede haber pasos atrás, así que conviene no precipitarse e ir poco a poco, ganando confianza y movilidad. Por suerte he tenido un equipo médico y de fisioterapeutas muy bueno que se han implicado mucho en mi lesión y todo ha ido muy bien", dice.

"Por suerte o por desgracia nos hemos quedado sin verano, trabajando muy duro, pero sabía que si quería volver cuanto antes tenía que trabajar duro y así lo hicimos". Y los resultados no podían ser mejor. En la primera jornada ya pudo vestirse de corto. Una jornada que empezó de la mejor manera para los intereses del equipo porriñés.

"Al no haber muchos cambios en la plantilla (solo dos bajas y una incorporación) hemos mantenido la misma dinámica", dice la central, que asegura que la ambición del equipo esta temporada será la de "aspirar a mejor lo que hicimos el año pasado".

Cecilia Cacheda cree que esta temporada "todo va a estar un poco más apretado todavía". "Bera Bera sigue estando un poco por encima, pero Guardés se ha reforzado muy bien, al igual que Zuazo. En la lucha por la zona alta las cosas van a estar muy complicadas y creo que los recién ascendidos como Mavi o Villaverde también van a dar de que hablar".

Cacheda espera que esta campaña se confirme que la afición se ha enganchado al balonmano femenino después de la disputa de la Copa de la Reina en O Porriño, o del buen papel de la selección femenina en Río. "Vamos a trabajar duro para que la grada se enganche al balonmano", anuncia.

Así que urge ponerse al cien por cien cuanto antes, aunque no se fija plazos. Dejará que sea su hombro el que hable. "Aún tengo miedo a caerme sobre el hombro, al cuerpo a cuerpo", reconoce. "Cuando me dieron el alta entré por el pabellón eufórica", dice. Fue el primer paso para volver a ver pronto en acción a la Ceciclia Cacheda de siempre.