Aspas, celebra el gol de la victoria del Celta // JOSÉ LORES
Tenía que ser Aspas. El moañés representa la magia del "fútbol de salón", la apuesta por la cantera del Celta y la progresión de un club que pasó de pelear por la salvación en Segunda a sacar el billete por disputar, de momento, la Europa League. Todo ese retroceso se ha producido en cinco años, un lustro en el que el cuadro celeste y su afición han sido creciendo juntos, paso a paso, con una fe y una ambición como la que esta tarde han permitido doblegar al Granada.
El equipo de Berizzo también asistió a la fiesta por Europa. Con el billete bajo el brazo, Balaídos presentó sus mejores galas. También la meteorología acompañó. Día primaveral para que el ´EuroCelta´ florezca. El técnico argentino apostaba por un once ofensivo. Cambio en la portería y regreso de Hugo Mallo y Guidetti a la titularidad. En juego, tres puntos para auparse a la quinta plaza y mirar de reojo a un Villarreal que la Europa League le puede hacer perder fuelle en la competición doméstica.
El Celta comenzó bien el partido. El control del juego y el dominio era total. El Granada tampoco ponía oposición. Los nazaríes se mostraban muy respetuosos con la apuesta y estilo de un conjunto vigués que en este tramo final de temporada busca la guinda, el premio extra a una campaña sensacional. El premio llegó pronto. Biraghi derribada a Guidetti en el área. El sueco quería transformar la pena máxima, pero Iago Aspas tiró de galones. El moañés no perdonó y abrió el marcador para inyectar, todavía más, el delirio en la grada de Balaídos.
Con el paso de los minutos, las fuerzas se fueron equilibrando. Afloró la necesidad de un Granada que todo lo que no fuera perder era fundamental. El cuadro nazarí ya no buscaba sólo la contra ni la calidad de Peñaranda en los metros finales. El balón parado, tan esquivo para los celestes, amenazó la portería de Rubén Blanco. Lombán, uno de los destacados del choque, envió un cabezazo a la madera de la meta celeste.
El partido se iba al descanso con un Celta que volvía a sufrir las imprecisiones en el penúltimo pase en el área rival. El Granada seguía con vida. José González acertaba poco después de la reanudación con la entrada de Fran Rico. La sala de máquinas celeste no carburaba como en el primer acto. El pontevedrés se adueñaba de la medular y los andaluces se convertían en los dominadores del encuentro.
Fue cuando llegó el tanto del propio Fran Rico. El Granada, después de varios avisos, restablecía la igualada con un remate desde fuera del área del centrocampista gallego que desviaba ligeramente El Arabi. Ya antes, Rubén había sacado una mano espectacular a Peñaranda. El equipo vigués no acusaba el gol. Daniel Wass estuvo a punto de adelantar de nuevo al Celta, pero se encontró con una buena intervención de Andrés Fernández.
El partido llegaba a su tramo decisivo con dos equipos que no bajaban los brazos. El punto servía, pero no aclaraba el panorama de sus respectivos objetivos. Fue cuando surgió de nuevo la figura de Iago Aspas. Preciosa jugada asociativa que termina con un pase en profundidad de Nolito hacia el moañés que, con la punta del pie, sorteaba por alto la salida de Andrés Fernández. Golazo, un tanto que decidía un partido complicado ante un rival que se estaba jugando la vida en Primera División.
Al final, el Granada tomó el mando. Tuvo la posesión, pero no acabó por finalizar ninguno de sus ataques. El Celta, por su parte, tampoco estuvo acertado para aprovechar los espacios que dejó atrás el Granada. El desgaste pasó factura a ambos conjuntos. Los andaluces deben seguir luchando por seguir en la élite del fútbol español mientras que los vigueses ya forman parte de la élite de Europa. ¿Dónde está el límite?
Ficha técnica:
Celta: Rubén Blanco; Hugo Mallo, Cabral, Sergi Gómez, Planas (Jonny, 82´); Marcelo Díaz (Radoja, 86´), "Tucu" Hernández, Orellana; Iago Aspas, Nolito y Guidetti (Wass, 68´).
Granada: Andrés Fernández; Miguel Lopes, Lombán, Babin, Biraghi; Doucuré, Khrin (Fran Rico, 63´), Rochina (Rober, 78´), Cuenca; Peñaranda y El Arabi (Barral, 82´).
Goles: 1-0: Iago Aspas (16´) (penalti); 1-1: Fran Rico (68´): 2-1: Iago Aspas (75´).
Árbitro: Gil Manzano (comité extremeño). Mostró tarjeta amarilla a Planas y Aspas por parte del Celta mientras que por parte del Granada vieron cartulina amarilla Miguel Lopes, Babin y Rober Fernández.
