El Real Madrid avanzó al 'Top 8' de la Euroliga al derrotar (83-70) al Khimki en el Barclaycard Center, un duelo a vida o muerte que resolvió la artillería blanca para aferrarse a la defensa del título continental en la última jornada antes de los cuartos de final, donde se medirán con el Fenerbahce.

El vigente campeón de Europa salió airoso de una final anticipada ante un rival que también se jugaba su futuro. Los de Pablo Laso, con Jaycee Carroll (23 puntos), Felipe Reyes (18) y Sergio Llull (11) sumaron méritos para tumbar poco a poco a un rival sustentado únicamente por Rice. A remolque siempre, los de Ivanovic hicieron sufrir al defensor del título.

Ya en el primer cuarto se dio cuenta el Madrid de la exigencia que iba a plantear el Khimki. En 10 minutos los de Laso anotaron ocho triples, por uno de su rival, pero el marcador no reflejó esa diferencia (33-28) gracias al 12/13 visitante en tiros de dos. Los esfuerzos primero de Sergio Llull y después de todo el Palacio por intimidar a los de Ivanovic no funcionaron.

Llull, Rudy y Reyes anotaron por partida doble en el triple, pero Tyrece Rice y Paul Davis sujetaron a los rusos. Las defensas brillaron por su ausencia también en el segundo cuarto. El Madrid sí comenzó mejorando atrás, dejando sin anotar a su rival durante tres minutos, hasta que Rice irrumpió con 11 puntos seguidos (41-39).

El verdugo de los blancos hace dos años, con el Maccabi, en la final de la Euroliga, se bastó para igualar el torrente ofensivo de los de Laso (22 puntos al descanso). Carroll tomó el testigo para volver a romper al Khimki desde el perímetro pero de nuevo, al parón esta vez del descanso, la diferencia mantenía el duelo en un puño (54-49).

El tira y afloja del tercer cuarto lo lideró también el Real Madrid. En esta ocasión algo más de tres minutos sin anotar de los rusos permitieron a los de Laso acomodar el partido (59-49). Una vez más el Khimki se apuntó al amago de remontada, pero esta vez Rice quedó bien vigilado. El Madrid puso tierra de por medio con Carroll.