El Villalonga, en un partido muy serio, superó otro escollo en su camino a Tercera División. Los locales apenas dieron opción a su contrario, que a pesar de ello mostró mucho oficio, dejando entrever que es otro serio aspirante al ascenso.
El partido comenzó con un ritmo vertiginoso, aunque hubo que esperar hasta el minuto 10 para ver la primera de las aproximaciones con cierto peligro. Llegó por parte de los locales. Diego Blanco le ganó la posición a su marcador en el área, pero el portero neutralizó su remate.
En el minuto 19, el portero visitante tuvo que salir a cortar una acción fuera del área y lo hizo con la mano, lo que le valió la amonestación por parte del árbitro, mientras los locales le reclamaban su expulsión.
Los locales ya habían botado cinco saques de esquina sobre la portería de Isma y en el sexto llegó el gol al rematar raso el ariete villalongués Diego Blanco, adelantándose asi los locales.
El Gondomar se recuperó pronto e incluso subió el ritmo del partido, pero sin conseguir romper el guion marcado por el equipo de Antonio.
La segunda mitad continuó con el mismo guion. Los locales no se conformaban con el resultado y en el minuto 36, el peligroso Javi Pazos logra disputarle al portero un balón dentro del area pero falla a puerta vacía. Un minuto más tarde el portero visitante, al sacar de portería, tuvo la mala suerte de enviar el balón a sus pies, y Javi Pazos no perdonó, tirando por tierra las aspiraciones visitantes de al menos lograr el empate para mantener los 9 puntos que le distanciaban, mientras los locales se consolidan ya casi de una forma definitiva en el camino a la Tercera División.
Los socios apoyaron por la mañana en asamblea las gestiones y el estado económico del club, cuya reducción marcha por buen camino.
