El juez disciplinario de la ACB, Juan Ramón Montero, ha decretado el sobreseimiento y archivo de las actuaciones relacionadas con las supuestas irregularidades de los pasaportes de los jugadores Andy Panko y Marcus Slaughter "por existencia de causa de prejudicialidad penal".

La ACB informó ayer en un comunicado de que el pasado 1 de febrero trasladó a Montero las informaciones aparecidas en prensa sobre ambos casos "solicitándole el estudio de los hechos publicados y la adopción por su parte de la decisión que procediera en relación a posibles responsabilidades disciplinarias deportivas en ambos casos".

Una vez analizada la información enviada por la ACB, Fuenlabrada y Real Madrid, el juez ve que "no aparece ningún hecho que pudiera ser imputable directamente al club, en tanto las denuncias se encaminarían a una pretendida falsificación por los jugadores de sus pasaportes y nacionalidad ecuatoguineana, que actualmente estaría sometida a procedimiento penal, resultando por tanto competencia del Juzgado de Instrucción de Madrid la acreditación de aquella falsedad".

La resolución judicial añade que "solo en el caso de que se confirmara el conocimiento, voluntariedad o cooperación de los clubes en la falsedad, y, en consecuencia, de tener constancia de la indebida alineación", se podría entender su responsabilidad. El fallo es recurrible ante el Comité de Apelación de la Federación Española.