Eduardo Berizzo aseguró después de ganar 0-1 al Getafe en el Coliseum Alfonso Pérez, que su rival "no debió perder" porque hizo méritos para lograr un empate. El técnico argentino reconoció que los hombres de Fran Escribá merecieron un resultado más favorable después de un choque que solucionó Nolito con un gol en la segunda parte.

"El empate hubiese premiado todo el esfuerzo de nuestro rival. Lo digo con honestidad. Ellos estuvieron mejor en la primera parte, después arrancamos mejor, en la segunda parte. Un partido tan cerrado, tan poco jugado, tan abierto a los pases, hoy había que trabajar y tener oficio", declaró.

"Son esos partidos que hacen caja y que uno luego recuerda en la cuenta numérica. Se está arriba por ganar partidos como estos, ante un rival necesitado. Hoy no debió perder. En fútbol, un partido así, se inclina la balanza del lado de quien convierte. Fue un partido sólido, supimos defender y nos vamos con el empuje de haber logrado una victoria más", añadió.

Berizzo reconoció que el Celta no hizo el partido que él esperaba porque apenas hilvanó jugadas de ataque, que sólo llegaron después de firmar contragolpes y definió el duelo como un encuentro "de oficio". "Nos podían hacer daño con Sarabia, Álvaro y Víctor. En la segunda parte jugamos mejor que en la primera. Nunca habíamos ganado en este campo y nos vamos contentos porque son tres puntos importantes. Para el Getafe la derrota ha sido un castigo demasiado grande", insistió.

También habló sobre Nolito y el tanto que marcó su jugador, después de tres meses ausente de los terrenos de juego por lesión: "Queremos ir progresando en minutos con él. Ha jugado más. Para él el gol, convertir siempre es un espaldarazo de confianza. Entró como queríamos, el gol le dará confianza para terminar de reaparecer". "Deja atrás un montón de situaciones, pero principalmente la ausencia del equipo y que se sintiera fuera. Su regreso para él es muy bueno. Es un jugador desequilibrante y le necesitamos para el final del campeonato", comentó.

Por último, habló sobre los objetivos del Celta: "Cuando empezamos la temporada, nuestro principal objetivo era la permanencia. Gracias al compromiso y a la entrega de la plantilla, hemos elevado las miras y podemos soñar con Europa. La Liga de Campeones es una tarea compleja. Pero este cambio de objetivos se debe a una plantilla entregada. No se ponen límites cuando se trata de ilusiones. Lo noto en el día a día", concluyó.