El Celta Zorka demostró en Cáceres que ya no es aquel equipo inexperto que sufrió un severo correctivo en el pabellón de Navia. Las viguesas obligaron ayer al líder de la categoría a esforzarse al máximo, y solamente dos minutos de desconcentración le pasaron factura al final del encuentro.
El partido comenzó fuerte por parte local, que lograba dos triples para ponerse rápido por delante en el marcador. El cuadro vigués no tardó en reaccionar y empataba el encuentro a ocho.
La igualdad se mantuvo durante el resto del periodo, aunque el cuadro local logró llegar al final del cuarto con tres puntos de ventaja 21-18.
El segundo cuarto comenzaba con un triple de Iria Varela que empataba el encuentro a 21 puntos. Los nervios se apoderaron de ambos conjuntos y los errores no tardaron en llegar. Sin embargo, al equipo vigués comenzaba a pasarle factura sus problemas bajo el aro, ya que el Al-Qázeres dominaba el rebote, sobre todo con Forster y Cisse. De hecho, al final del encuentro esa fue una de las claves para que el resultado final cayera del lado local, pues el Al-Qázeres atrapó 51 rebotes y el Celta Zorka 28.
A pesar de todo, a cinco minutos para el descanso el Celta Zorka mandaba en el marcador por un punto, 25-26. En los instantes finales, Taylor fue quien tomó las riendas de su equipo, logrando marcharse al descanso con nueve puntos de ventaja para el Al-Qázeres, 40-31.
Reaccionó el equipo entrenado por Cristina Cantero tras el paso por el vestuario. Las viguesas logran un parcial de 0-8 y se pone a un punto en el marcador, 40-39. Ahí llegó el momento de bajón del Celta Zorka, que vio como el cuadro local abría una ligera ventaja en el marcador, que le permitía encarrilar el partido.
Un parcial de 14-2 marcaba una diferencia que al final sería imposible de recortar para las viguesas que, a pesar de todo, no entregaron el partido y siguieron buscando darle la vuelta al marcador.
El cansancio comenzó a aparecer en las filas del Celta Zorka, pues no podemos olvidarnos que viajó a Extremadura con tan solo ocho jugadoras, y el ritmo del encuentro fue muy alto. Ogoke anotaba con relativa comodidad para que las diferencias no fuera demasiados amplias, y al final se cumplió la lógica con la victoria local, pero obligadas a esfozarse al máximo por el equipo vigués y a mantener la tensión durante todo el encuentro.
El Celta Zorka jugará el próximo sábado en Navia el partido más importante de la temporada, ya que recibe, a partir de las 17 horas, al Universidad de Oviedo, equipo que marca en estos momentos los puestos de descenso.
El conjunto asturiano está a tres victorias de las viguesas, por lo que una victoria será casi definitiva para certificar la permanencia, una temporada más, en la segunda categoría del baloncesto femenino nacional.
