Tras salir derrotado del Camp Nou (6-1), Eduardo Berizzo asegura que el "castigo fue demasiado" abultado" por el esfuerzo, la manera de jugar y por cómo" desafiaron el poderío del Barcelona.

A pesar de la derrota, el entrenador argentino elogia el nivel de sus jugadores en un partido que, en su opinión, habían controlado hasta el 2-1 del Barcelona en los primeros minutos del segundo tiempo. "El partido estaba en un 2-1 y tuvimos claras ocasiones que podrían habernos dado el empate y meternos en el partido. Tuvimos nuestra oportunidades y al no marcar en este campo lo pagas", analiza.

En cualquier caso, Berizzo subraya que regresa a Vigo con buenas sensaciones: "Vinimos a un campo difícil, recibimos muchos goles en contra, pero hay muchas cosas a rescatar. Le sacaría goles al partido y me dejaría menos insatisfecho".

Según el preparador argentino, "se impuso el talento" de los jugadores azulgranas en un "partido muy bien jugado" por parte de sus pupilos hasta el segundo gol de Suárez. "El castigo es demasiado por el esfuerzo la manera de jugar y por haber desafiado el poderío del rival", precisa Berizzo, quien también se ha referido al penalti indirecto creado por Messi y Suárez. En este sentido, niega que la pena máxima transformada por el uruguayo haya sido una falta de respeto hacia sus jugadores: "Creo que la delantera del Barça ha dado muestras de jugar siempre de la misma manera. Son respetuosos con el rival, voraces en ataque y detallar en el penalti no viene a cuestión. No ha sido algo que haya salido de la legalidad".

Tampoco quiere entrar a valorar algunas jugadas de Neymar con el partido sentenciado. "En los códigos del fútbol existen reglas no escritas. Neymar las hace con los partidos cerrados e incluso difíciles y es parte de su juego. Siempre juega al fútbol así", zanja.