El Octavio se aferra a la vida en As Travesas. El conjunto académico consigue un valioso triunfo frente al Amenabar (31-23) que les da esperanzas a pesar de que todavía siguen colistas. Con esta victoria los rojillos respiran y además consiguen una siferencia de goles positiva frente al conjunto vasco, rival directo por la permanencia.

Los jugadores dirigidos por Jabato consiguieron llegar al descanso con un marcador igualada, pero en el arranque de la segunda mitad pisaron el acelerador y abrieron brecha en el marcador ante un desfallecido Amenabar que nada pudo hacer ante la seriedad con la que estaban jugando los locales. La actuación en la portería de Lloria fue, una vez más, fundamental. Borja Méndez, con ocho tantos, fue el máximo artillero del Octavio.