Unai Emery, entrenador del Sevilla, dio por bueno el punto sumado por su equipo en Balaídos, de donde dijo que salen "reforzados" tras aguantar con un futbolista menos a un rival tan "peligroso" como el Celta. "Lo más importante es que seguimos siendo quintos, después de lo mucho que nos costó llegar hasta ahí, y salimos de aquí reforzados. Queríamos una victoria para dar un golpe y afianzarnos en esa posición pero no ha podido ser. Tal y como fue el partido, nos vamos contentos porque incluso hemos podido perder", aseguró tras el choque el preparador sevillista.

"Tras la expulsión tuvimos ciertos momentos de crearle incertidumbre y marcar algún gol pero perdimos el control del partido. Y en el segundo tiempo logramos defender bien, con mucha solidez y generosidad en el esfuerzo, porque si alguien estaba más cerca de marcar era el Celta", dijo.

Unai Emery no recriminó al argentino Federico Fazio su expulsión, que achacó a la falta de ritmo competitivo del zaguero, que acaba de regresar de una lesión. "Él ya sabe que llegó a destiempo a la jugada, pero no voy echarle la culpa, aunque sí es verdad que ha habido dos partidos, uno antes de la expulsión, que controlamos bien y otro después, en el que el control fue para el Celta", declaró el técnico vasco.Finalmente, preguntado por el partido de vuelta de Copa del próximo jueves tras el 4-0 logrado por sus jugadores en el Sánchez Pizjuán, Emery manifestó que deben afrontarlo "con respeto" y con "el reto" de seguir creciendo como equipo.