Rafa Sáez reconoció en la sala de prensa del campo de O Vao que "era un partido muy difícil. Sabíamos de entrada que el Izarra era un equipo muy rocoso, incluso en este encuentro manifestó con una defensa de cinco su intención de venir a empatar el partido, pero la verdad es que nosotros, sin tener juego aéreo, sin juego de meter el balón al área, nos quedó un poco mover la pelota, tratar de elaborar con algún pase, intentar alguna estrategia y bueno, a ratos, porque el partido fue una montaña rusa de sensaciones, ocasiones de ellos, nuestras, y lo curioso es que finalizó con empate a cero.".

Sobre el desenlace, el técnico afirmó que "si de alguna manera el partido tenía que terminar en empate, para nosotros dejar la portería a cero es un valor añadido. Acabar con la racha de derrotas parece poco, fue con un empate, pero posiblemente si lo pudiéramos haber dicho hace un par de semanas estaríamos un poco más contentos. En cualquier caso es un empate, tenemos un punto más y vamos a pensar en el siguiente partido".