El Celta reina en Granada con una incontestable victoria frente al conjunto nazarí. El conjunto celeste dio una lección de sobriedad sobre el césped y ajustició a los andaluces con dos destellos de fútbol de salón. No importaron las bajas, tampoco mermó al equipo la presencia en el once de algunos actores secundarios. Porque en Los Cármenes brillaron los de siempre y los menos habituales. Orellana y Aspas consiguieron los goles del conjunto vigués después de dos grandes acciones combinativas con Josep Señé, hoy titular, como protagonista. El Celta seguirá una semana más en puestos de Liga de Campeones a la estela del Barça, del Atlético y del Real Madrid.

Las sanciones y las lesiones obligaron a Berizzo a recomponer su dibujo habitual. El argentino, además, decidió alinear en la portería a Rubén Blanco, que no era titular en Liga desde la primera jornada. En defensa, Mallo repitió como central junto a Cabral, mientras que los carriles derecho e izquierdo quedaron para Jonny y Planas. De la medular se encargaron Augusto y Wass, con Orellana como enganche. Por delante, Señé, que hasta ahora solo había jugado un par de minutos, formó un inédito trio atacante junto a Bongonda y Aspas.

El Celta no necesitó mantener su habitual ritmo frenético durante todo el choque. Incluso se permitió el lujo de perder la batalla por la posesión a favor del Granada. A los vigueses les bastó con demostrar solidez en defensa y abusar de su efectividad en el área contraria. Y es que los del 'Toto' Berizzo despacharon a los nazaríes en los primeros cuarenta y cinco minutos con dos jugadas de tiralíneas por la banda derecha, en la que la irrupción de Señé fue fundamental. En el primer gol, el atacante catalán se plantó solo en el lateral del área después de tirar una bonita pared con Aspas y cedió el gol en bandeja a Orellana, que llegaba por el centro. En el segundo tanto celeste, igual de fugaz pero más elaborado, intervinieron más protagonistas. Wass, Orellana y Señé tocaron cerca de la línea de cal para darle tiempo a Jonny a aparecer por sorpresa dentro del área. El de Matamá dejó un pase de la muerte perfecto a Aspas, que marcó su octavo gol en Liga justo antes del descanso.

La segunda mitad apenas tuvo historia. El Granada no encontró la llave para abrir ninguna de las puertas del Celta. Todas estaban cerradas. Tan solo el nigeriano Isaac Success, muy activo durante los noventa minutos, causó algún quebradero de cabeza a Carles Planas. El Celta dosificó esfuerzos hasta el final del partido para asegurarse su quinta victoria como visitante y sumar 31 puntos, que le permiten mantener la cuarta plaza un punto por encima del Villarreal, que hoy ganó 0-2 a la Real Sociedad, y a dos del Real Madrid.