Balaídos ha comenzado a someter a Sergio Álvarez a un exhaustivo examen, como hace semanas le ocurrió a Pablo Hernández. El chileno-argentino salió airoso de las quejas de un sector de la afición que incluso provocaron una respuesta pública por parte del club. Los detractores del guardameta de Catoira ya han aparecido tras sus últimas actuaciones. Parte de Balaídos ya le cuestiona. Sus quejas, por el momento, se reducen a un murmullo, a un runrún que se extiende por el estadio y que ha molestado a jugadores como Nolito, que el sábado lanzó un improperio al marcar el gol del triunfo ante el Sporting contra quienes criticaron el error del guardameta en el tanto del empate del conjunto asturiano.

El gaditano no ha sido el único en mostrar su solidaridad con Sergio Álvarez. Ayer defendieron al guardameta del Celta dos excompañeros de profesión, que además conocen bien al Gato de Catoira por haber trabajado en A Madroa. Javier Maté y José Covelo coinciden en señalar como precipitadas las críticas a Sergio, en el que confían y esperan que protagonice una temporada tan brillante como la anterior.

"A mí, Sergio no me ofrece dudas. Me parece que se está creando una dinámica que a lo mejor a él le puede afectar porque es verdad que el runrún está ahí, pero lo debe de asumir como algo normal", señala Maté, quien en su etapa como cancerbero del Celta también vivió momentos parecidos.

"Sergio realizó una gran temporada el año pasado, fue de los mejores del equipo. El segundo año en Primera siempre es mucho más complicado. Para mí, este año continúa estando a un nivel alto, pero la afición está con dudas porque ha tenido dos o tres acciones en las que no ha estado bien. El tiene que seguir trabajando, haciendo lo que hacía hasta ahora. Lo que sí creo es que la afición debería tener más confianza en él", sostiene Covelo, que jugó en el Barcelona antes de recalar en el cuerpo técnico del Celta como preparador de guardametas del primer equipo.

Mientras algunos aficionados señalaron al guardameta en las últimas actuaciones del equipo como en la jugada del segundo gol, en propia meta del Deportivo en el derbi de Riazor, Maté considera excesiva esa corriente en contra de Sergio:"Estoy un poco alucinado porque creí que tenía un pequeño crédito. Eso no quiere decir que tenga el puesto asegurado de por vida, pero me parece que es un debate que llega demasiado temprano. No me parece que haya los suficientes argumentos como para abrir un gran debate sobre el chico".

Covelo, por su parte, invita al celtismo, que ya ha empezado a alzar su voz contra el portero de Catoira, a no ser tan exigente con un canterano. "A la afición le pediría que le dé un margen de confianza. Como chico de club que ha trabajado mucho, merece un plus más. Creo que ese plus no se lo han dado a Sergio, que tiene que estar tranquilo, pensar las cosas positivas que el año pasado hizo bien porque éste va a hacerlo igual de bien. Sé que sigue trabajando igual porque lo conozco. Tiene que tener mucha tranquilidad y las cosas le saldrán como la temporada pasada. Sigo teniendo la misma confianza en él que tenía el año pasado", asegura el exazulgrana.

Maté sostiene que no es el momento de abrir un debate sobre Sergio "porque entonces tendríamos que estar criticando a la mitad de porteros de España, empezando por Cuéllar el sábado. No creo que en Gijón haya un debate respecto al portero del Sporting, o no lo entendería tampoco si lo hubiese".