El Celta se ha convertido en un rival temible fuera de casa, donde registra mejores resultados que en Balaídos en lo que va de campeonato. Esa racha positiva a domicilio del equipo de Berizzo se extiende más allá de la actual temporada, pues no cae derrotado lejos de Vigo desde que el 8 de marzo pasado encajó una goleada en Villarreal (4-1). Ocho meses después de aquel tropiezo, el conjunto vigués ha encadenado seis victorias y cuatro empates. Los célticos y el Real Madrid son los únicos equipos de Primera que este curso no han perdido todavía en campo rival.
Ese gran rendimiento a domicilio mantiene al Celta entre los tres primeros de la clasificación, después de disputarse diez jornadas de Liga. En las cinco salidas que llevan los de Berizzo en este curso, han ganado en los campos de Levante (1-2), Sevilla (1-2), Villarreal (1-2) y el sábado ante la Real Sociedad (2-3). Este ciclo de imbatibilidad se cierra con el empate contra el Eibar (1-1). En total, los celestes han anotado 10 goles y han encajado 6, para un total de 13 puntos sumados. A ellos añade los 8 que ha conseguido en Balaídos y con 21 de 30 posibles se mantiene a rebufo del Real Madrid y el Barcelona, que comparten el liderato de la Liga con 24 puntos.
Estos resultados positivos han ido acompañado en la mayoría de las ocasiones de un excelente juego, lo que convierte al Celta en el equipo revelación de la Liga y en un atractivo para las televisiones. La apuesta ofensiva de Berizzo atrae a muchos seguidores, técnicos y especialistas, que consideran a los celestes como uno de los conjuntos con el juego más brillante que se practica ahora mismo en Europa.
La inmaculada trayectoria fuera de casa comenzó tras la derrota en El Madrigal. En esa jornada, Berizzo varió el dibujo habitual del equipo -apostó por tres centrales- como opción ante la baja de Krohn-Dehli. El danés se había convertido entonces en la pieza fundamental del juego de control y toque que lucían los celestes. Salió malparado el equipo vigués y con la preocupación de tener que buscar un recambio para Krohn-Dehli, que en ese momento ya había decidido firmar por el Sevilla para la temporada siguiente.
Tras el descalabro en El Madrigal, el Celta ganó ante el Levante en la vigesimoctava jornada (0-1) y en las cuatro siguientes salidas empató en Granada (1-1), derrotó al Eibar (0-1) e igualó en Almería (2-2) y en Valencia (1-1). Con esos buenos resultados, el equipo de Berizzo finalizó octavo en la Liga.
El club firmó a Daniel Wass como recambio de su compatriota Krohn-Dehli. La dinámica del juego del equipo cambió, pero no se resintieron los resultados ni la brillantez con la que resolvían los partidos. En el actual Celta, Orellana ha ganado protagonismo al disponer de más libertad de acción, Aspas es un refuerzo de calidad y aparte de marcar goles genera más alternativas en el juego del resto de compañeros, Nolito y Augusto Fernández viven el mejor momento de sus carreras deportivas y con Wass el juego es más vertical. A todo ello hay que sumar la experiencia que ha adquirido una de las plantillas más jóvenes de la categoría.
Con todos esos ingredientes, Berizzo ha confeccionado un once tipo, sin apenas rotaciones, que ha alcanzado momentos sublimes de fútbol, como el primer tiempo en el Sánchez Pizjuán o la goleada al Barcelona en Balaídos.
En las cinco primeras visitas que los célticos han realizado en lo que va de campeonato, consiguieron cuatro victorias (Levante, Sevilla, Villarreal y Real Sociedad) y un empate (Eibar). Con ello, se han convertido en el mejor equipo a domicilio de la Liga española, por delante del Real Madrid y el Barcelona, que le superan en la clasificación general con tres puntos de ventaja.
Los merengues suman 11 puntos fuera (tres victorias y dos empates), por 10 de los azulgranas (tres triunfos y dos derrotas, una de ellas en Balaídos).Villarreal, Eibar, Deportivo y Betis se sitúan a continuación, con 8 puntos fuera de casa. Esta tabla la cierran cuatro equipos que solo han sumado un empate como visitantes: Levante, Málaga, Las Palmas y Getafe. Los dos últimos obtuvieron ese punto en su visita a Balaídos.
En casa, el Celta ha encontrado más dificultades para sacar los partidos adelante. De las cinco ocasiones que ha jugado en Balaídos, los de Berizzo han obtenido dos victorias (Rayo Vallecano y Barcelona), dos empates (Las Palmas y Getafe) y una derrota (Real Madrid). Ocho puntos de quince posibles es lo que ha conseguido el conjunto celeste ante su afición. En ese caso, ocho equipos presentan mejores registros en casa que los celestes, a los que les cuesta superar a rivales que acuden a Vigo con precauciones defensivas y jugando a la contra, a la espera de aprovechar un fallo del Celta para montar un contraataque. Y ahí no es tan fuerte el equipo vigués como a domicilio, donde se ha convertido en el rival más temible de Primera División.
