El veterano presidente del Balonmán Cangas, Manuel Camiña, no ocultaba ayer su gran alegría por la gesta lograda esta temporada "por este grupo de chavales y veteranos". Pero enseguida ponía los puntos sobre las íes. "Conseguimos la clasificación para jugar en Europa. Ahora hay que ver si podemos jugar", en alusión al desembolso económico que eso supondrá para el conjunto más modesto de la categoría. "Ahora tienen que hablar los socios, los aficionados, el tejido comercial y las instituciones", afirma Camiña, que el lunes comenzará una ronda de reuniones para buscar financiación. "Tego la esperanza de que las instituciones nos valoren y que podamos jugar la Copa EHF. Tienen que ver que es lo que aportamos y el hecho de que somos el emblema del balonmano en Galicia", argumenta.

El presidente alaba a su plantilla e insiste que "estos chavales se merecen jugar en Europa". El coste económico de esa participación no es especialmente elevado. El problema es que el Cangas ya parte con el presupuesto más ajustado de la categoría y eso hace que cuadrar los números sea más complicado. "La gente tiene que valorar que somos el quinto club de España en balonmano y eso es mucho", sentencia Camiña.