Algunos ya la consideran la mejor delantera del fútbol mundial. Messi, Suárez y Neymar volvieron a demostrar el sábado su enorme poder destructivo. No hay defensa que se le resista al trío de estrellas del Barcelona. Alguna, como la del Celta, sí ha salido indemne del ataque del campeón de la Copa del Rey y de la Liga española, y que el próximo sábado logrará el ansiado triplete si vence a la Juventus en la final de la Champions League en Berlín. Ante el Athletic de Bilbao, la MSN anotó el gol 120 de la temporada, superando en dos el récord que en 2012 estableció el ataque madridista, formado entonces por Cristiano Ronaldo, Benzema e Higuaín.

Messi, Suárez y Neymar van camino de dejar una cifra de goles difícil de superar en próximas temporadas. En ese récord no aparecerá ningún gol al Celta, pues los de Berizzo fueron de los contados rivales durante esta temporada que supieron frenar al tridente mágico azulgrana. La MSN se estrenó en el Bernabéu. A la semana siguiente se presentó en el Camp Nou con la idea de barrer a los célticos. Pero la extraordinaria actuación de Sergio Álvarez en la portería y el brillante trabajo de la zaga (Mallo,Cabral, Sergi Gómez y Jonny), con la colaboración del resto del equipo celeste, logró frenar al que ya algunos comienzan a calificar como el mejor ataque del mundo.

Con el gol de Larrivey, el Celta se llevó los tres puntos de un Camp Nou que se quedó perplejo ante el desacierto del tridente mágico azulgrana.

En el partido de la segunda vuelta, disputado en Balaídos, volvió a repetirse la historia. La MSN se quedó seca ante un rival que solamente se dejó sorprender por un remate de cabeza de Mathieu. Fontás, pese a las advertencias de Berizzo, se despistó del marcaje del zaguero francés, que se fue hacia el segundo palo para rematar de cabeza el balón que Xavi le envió en un lanzamiento de falta.

Los tres tenores azulgrana, sin embargo, tampoco pudieron superar a la defensa del Celta. Los de Berizzo han conseguido lo que les resultó imposible a equipos como el Real Madrid, el Bayern de Múnich, el París Saint Germain, el Manchester City o el Atlético de Madrid.

Muy pocos rivales han encontrado el antídoto para frenar a Messi, a Suárez y a Neymar, que amenzan con repetir para el Barcelona el éxito de conquistar la triple corona (Liga,Copa y Champions) en la misma temporada, como hizo el conjunto catalán en 2009. Luis Enrique Martínez, que el curso pasado entrenó al Celta, igualaría así el éxito de su amigo Pep Guardiola, ahora al frente del Bayern.

El nexo de unión de esos dos momentos imborrables sería Lionel Messi, que sigue destrozando récords y defensas. El argentino resulta imparable en estos momentos, como demostró el sábado en el gol que abría el marcador y que ya se considera como uno de los mejores de la historia del fútbol. El antídoto para evitar esas obras de arte del astro azulgrana lo manejó el Celta esta temporada.