La cantera del Barcelona salió al rescate de La Rojita para superar el primer asalto del cuadrangular en el que se decidirá una plaza para el Europeo sub 19 de Hungría y el Mundial sub 20 de Nueva Zelanda. La selección española tuvo en la victoria ante Dinamarca (3-1) al barcelonista Adama Traoré como figura más destacada, demostrando el jugador de L'Hospitalet que está muy por encima del resto de jugadores que han iniciado esta competición que tiene como escenario Vigo (más un partido en Pontevedra) y que continuará mañana para afrontar el jueves el decisivo duelo entre España y Alemania.De ahí saldrá seguramente el ganador del Grupo V de esta Ronda Élite que ayer arrancó en Balaídos con los españoles y alemanes dominando a los daneses y a los lituanos, respectivamente. Los célticos Rubén Blanco, David Costas y Santi Mina fueron titulares, aunque solo lució el guardameta.

Le costó entrar en juego al equipo de Luis de la Fuenta ante una selección de Dinamarca muy ordenada, que esperó atrás y que cerró los pasillos de entrada. Había imprecisiones en el equipo español con la circulación del balón, que el adversario aprovechaba para salir de aventura. Así igualó Solberg en el arranque del segundo tiempo el tanto inicial de Sandro Ramírez, de penalti. Sin embargo, en la recta final del encuentro, Traoré volvió a aparecer para erigirse en el futbolista estelar del torneo y conducir a La Rojita a una victoria merecida.

La selección española sub 19 va sobrada de talento ofensivo, sobre todo por parte de los dos azulgrana que ayer acompañaron al céltico Santi Mina en la delantera. Sandro Ramírez y Adama Traoré están sobrados para esta competición. El primero es el goleador de referencia para Eusebio Sacristán en el Barcelona B. Traoré es una fuerza de la naturaleza, con velocidad y desborde. Ya es conocido en la pradera del Camp Nou y es posible que Luis Enrique le invite a la pretemporada del primer equipo. El jugador de 18 años de L'Hospitalet creabó muchos problemas por banda derecha a los daneses. Su portero le ganó un mano a mano a los siete minutos.A la media hora, en cambio, entró como una bala y fue deribado cuando ya había soltado el balón. El árbitro señaló penalti. Su compañero Sandro puso en ventaja a España tras la pena máxima.

Con el balón en su poder, los chavales de De la Fuenta no pasaban apuros. Para intentar que los daneses adelantasen líneas, intentaban engordar el marcador con lanzamientos lejanos. Y cuando no sabían qué hacer, allí estaba Traoré para regalar una exquisitez.

Parecía que España se llevaría una cómoda victoria, pues Dinamarca no exponía casi nada en ataque. Todo cambió, sin embargo, tras el descanso. España se dejó el balón en el vestuario. Dinamarca salió con el suyo y lo jugó en el campo español. Jensen estuvo a punto de empatar en el minuto 47, pero el céltico Rubén Blanco se estiró hasta Matamá para despejar el balón a córner. Los jugadores de Bent Christensen (que fue jugador del Compostela) insistieron y en la siguiente jugada Emiliano Hansen se escoró a la izquierda, el céltico David Costas estuvo flojo en la presión y el danés logró centrar para la llegada al área de Solberg, que fusiló a Rubén Blanco.

Dinamarca había necesitado solo tres minutos de buen juego para conseguir el mismo resultado que España en toda la primera mitad. Sin balón, La Rojita mostraba carencias importantes para defender. El seleccionador español buscó soluciones en el banquillo pasada la hora de juego, pues su equipo se había entregado a lo que pudiera conseguir Traoré.Buscó el técnico un futbolistas más afín al barcelonista. Su compañero en Can Barça Munir El Haddadi sustituyó al céltico Santi Mina. Seis minutos despúes funcionó la conexión azulgrana. Traore se burló de medio equipo danés y centró para que Munir disparase al fondo de la portería desde el corazón del área.

El tanto reforzó a La Rojita, que desperdició una gran ocasión cinco minutos más tarde. Sandro Ramírez envió por encima del larguero el balón que le puso Munir. El delantero nacido en El Escorial había revolucionado al equipo español, que aumentó la diferencia en el último minuto con un lanzamiento desde fuera del área de Unai López, centrocampista del Athletic de Bilbao, que acababa de sustituir al grancanario Sandro Ramírez.

Con Traoré, la selección española es favorita para ganar este torneo.