La Liga en noventa minutos

Después de 37 jornadas, de mil y una peripecias, el título de la Liga 2013-14 se decidirá a un partido. El torneo de la regularidad depende de un K. O. Los fallos de los tres aspirantes hasta hace una semana han hecho posible este desenlace, tan atípico como apasionante. El Atlético de Madrid parte con la ventaja los tres puntos que lleva a su rival, con lo que le vale el empate para cantar el alirón. El Barcelona podrá jugar la baza del escenario, un Camp Nou que se volverá a llenar tras los desengaños que ha sufrido el barcelonismo en los últimos tiempos. Puede ser el broche de oro para el entrenador más valorado, Diego Pablo Simeone, o un apreciable consuelo para Gerardo Martino, que hace un mes acordó con el club su salida, pasara lo que pasara. Los dos técnicos se rearman para la batalla: Piqué reforzará la defensa azulgrana y Diego Costa revitalizará el ataque colchonero.

"Deseo con toda el alma ganar el partido, pero en mi carrera no tendrá un cambio fenomenal. Porque yo decido qué quiero ser. No hay título que modifique mi carrera", recalcó ayer Martino para dejar claro que su decisión de abandonar el Barcelona no depende de lo que ocurra hoy. El técnico argentino, que ha reconocido varias veces que no está satisfecho de su labor, dejó una curiosa reflexión: "De ganar sería el primer título de estos jugadores haciendo una temporada normal porque los anteriores fueron extraterrestres".

Al igual que en la víspera del partido de vuelta de la Liga de Campeones, para Martino tendría "especial relevancia" tomar ventaja en el marcador "por la manera de jugar" del Barcelona: "Los rivales se encierran más y cuesta encontrar los espacios". Martino incluyó en la convocatoria a Piqué, Jordi Alba y Neymar, lesionados en las últimas semanas, con más opciones de jugar para el central. "Probablemente no estén en las mejores condiciones, pero no hay que jugar seis partidos seguidos, solo queda un partido y es de 90 minutos", recalcó Martino

Fiel a su constumbre, el Cholo Simeone no ocultó sus intenciones para esta tarde respecto a su jugador más importante: "Diego Costa está bien, así que mañana (por hoy) arrancará desde el inicio". Junto a él formará el asturiano David Villa, otra de las amenazas para las aspiraciones de su ex equipo. El Guaje marcó a los once minutos de su primer enfrentamiento con el Barça, en la Supercopa, y fue silbado por el público del Camp Nou en sus dos visitas de esta temporada. Desde entonces no ha vuelto a ver puerta, aunque sus estadísticas en el estadio barcelonista son notables.

Villa ha marcado seis goles en diez visitas al Camp Nou en su paso por el Zaragoza, el Valencia y el Atletico de Madrid, aunque ninguno con su actual equipo. El Guaje es el único jugador de la plantilla rojiblanca que se ha proclamado campeón de Liga. Simeone ha alineado a Villa en diez de los últimos once partidos oficiales, aunque el asturiano no marca desde que el 8 de marzo logró un doblete en el campo del Celta (0-2).

Simeone destacó ayer que "siempre para atacar bien, hay que defender mejor" y explicó que el 0-0 válido para el Atlético «condiciona el 50 por ciento del partido», porque enfrente estará un rival "que siempre está acostumbrado a atacar y que juega siempre de una misma forma. Nosotros necesitamos hacer un buen partido y llevarlo donde nos conviene, que es jugar con los espacios y tener velocidad en ataque. Mi equipo mantiene la misma identidad durante todos los partidos".

Según Simeone, "nunca" imaginó llegar a la última jornada tres puntos por encima del Barcelona y cinco por delante del Real Madrid. "Un equipo del poder que tiene el Barcelona, aún estando lejos de los primeros lugares la última semana, nunca dejó de competir ni la posibilidad de estar cerca de reengancharse a la Liga". El Barcelona no ha sido capaz de ganar al Atlético en ninguno de los cinco partidos de esta temporada.