Evitar "riesgos innecesarios" con Rafinha Alcántara

Asegurada la permanencia, en el Celta se impone la prudencia para evitar males mayores con la lesión que arrastra Rafinha Alcántara en un pie desde hace semanas. El jugador no viaja a Pamplona después de pasarse toda la semana sin entrenar con el resto de la plantilla. El hispano brasileño anunciaba el jueves que ya no recibiría más infiltraciones en la parte dolorida. Ayer, Luis Enrique anunció que no está dispuesto a correr "riesgos innecesarios" con el futbolista cuando el equipo ya ha cumplido el objetivo que se marcó para esta temporada. Ahora, la duda que se plantea es si el centrocampista cedido por el Barça estará en condiciones de jugar contra el Real Madrid el 11 de mayo en Balaídos. El equipo blanco quiere mantener su candidatura al título hasta el último minuto. El Barcelona, con los mismos objetivos que los merengues, agradecería la colaboración de Rafinha para que su eterno rival se marchase sin puntuar de Vigo.

"Ya no tiene sentido correr riesgos innecesarios porque Rafa ha jugado los últimos partidos infiltrado y esa lesión puede ir a más", proclamaba ayer Luis Enrique al referirse a la artritis traumática en el primer dedo del pie izquierdo que sufre el jugador y de la que todavía no ha terminado de recuperarse.

El centrocampista se lesionó en un entrenamiento previo a la visita del Atlético de Madrid. Ese día, en las instalaciones de A Madroa le esperaban representantes de la Liga para entregarle el trofeo como mejor jugador del mes de febrero. Culminaba así Rafinha un tramo inicial de la segunda vuelta excepcional. Todo comenzó el Día de Reyes en el Santiago Bernabéu, donde el hispano brasileño realizó uno de sus mejores partidos con la camiseta celeste.

Tras un inicio de temporada con ciertas dudas sobre su ubicación y rendimiento, Rafinha fue encontrándose cómodo como interior por el costado derecho. Ha disputado 31 partidos de Liga, en los que fue titular en 26. Es el cuarto jugador que más ha utilizado Luis Enrique este año, con 2.459 minutos. Ha marcado cuatro goles y ha dado cinco asistencias.

El futbolista intentará apurar su recuperación para jugar el domingo de la semana que viene ante el Real Madrid. Ese partido supondrá la despedida de la temporada en Balaídos, y el hijo de Mazinho querrá recibir el homenaje de una afición que ante el Valladolid lo despidió con cánticos invitándole a que se quede otro año en el Celta.