El Bembrive lo tiene en su mano. Los vigueses cumplieron con su parte al vencer en esta penúltima jornada al Zamora y vieron cómo la fortuna les sonreía al caer el Universidad de Valladolid en su visita al Albense (4-3). Si son capaces de ganar dentro de quince días en la cancha de O Esteo, la segunda plaza es suya. El empate serviría incluso para asegurar el tercer puesto y lograr igualmente el objetivo de disputar la próxima campaña la Copa del Rey sin depender de otros resultados.

Los locales se mostraron muy nerviosos en el inicio y los visitantes dispusieron de múltiples ocasiones claras para batir a Carlos Areces, sustituto en la portería del lesionado Cuca. Sin embargo, los zamoranos desaprovecharon sus oportunidades y el Bembrive se fue asentado sobre la pista. Jacobo confirmaba la mejoría con un tanto en una veloz contra que les permitía marcharse en ventaja al descanso.

La segunda parte fue ya otra historia. El conjunto de Pitu había soltado los nervios y ahora era claro dominador. La expulsión de Zeus al ver la segunda cartulina amarilla puso en bandeja la oportunidad de incrementar la ventaja. Un tiro de Nené, tras tocar en Javi Cala, acabó convirtiéndose en el 2-0. A partir de ahí todo fue mucho más fácil. Jacobo daba un nuevo paso adelante hacia el objetivo.

Los visitantes buscaron la remontada por medio del portero-jugador pero la apuesta tuvo el resultado opuesto al esperado ya que en la primera acción en la que lo intentaron los locales cerraron el encuentro con un nuevo tanto de Jacobo. El tanto final del Zamora ni siquiera inquietó a un Bembrive que ya celebraba el triunfo. Una victoria que pone en su mano redondear una histórica temporada con el subcampeonato.