- ¿Qué supone el punto ante el Barcelona, aparte de permitirle al Celta adelantar al Mallorca en la clasificación?

- Es una inyección de moral importante, por supuesto, porque ha sido un punto muy trabajado y logrado a última hora. Supone un subidón anímico para el equipo.

- Abel Resino reconocía el sábado que este empate significaba "un punto de inflexión" para el equipo.

- Lo debemos de tomar así. El equipo dio muy buena imagen el sábado, estuvo peleando por el partido desde el primer minuto hasta el último, y a partir de ahí tenemos que crecer.

- Tras recibir a los grandes y jugar el derbi, ahora les toca una fase de competición con rivales en teoría más asequibles: Rayo, Mallorca, Zaragoza...

- No son el Real Madrid o el Barcelona, por supuesto, pero son equipos que vienen haciendo bien las cosas, como el Rayo Vallecano. Eso nos va a exigir la misma o una mayor concentración que ante los grandes. Si no lo afrontamos así, lo pasaremos mal. El equipo es consciente de que haciendo las cosas bien puede sumar ante cualquier rival. Eso no lo podemos perder. Faltan nueve jornadas y el equipo está más vivo que nunca; vamos a pelear hasta el final.

- ¿El derbi de Riazor los dejó muy tocados?

- Sí, porque en ese tipo de partidos, con la rivalidad que hay entre los equipos, escuece mucho más la derrota. Pero el equipo ha sabido rehacerse a este tropiezo y ha sido capaz de sumar un punto ante todo un Barcelona.

- ¿El ambiente en el equipo es muy distinto tras una igualada como la del sábado?

- Sí, claro. Resultados así ayudan mucho psicológicamente al grupo. En los equipos que las cosas no salen como deberían o como tú esperas y te encuentras abajo en la clasificación, un resultado positivo ante un grande ayuda mucho a levantar la moral del equipo. De todas formas, en el vestuario se procura tener la cabeza fría, pensando que tenemos una semana larga y días por delante para trabajar y seguir mejorando cosas para afrontar el partido contra el Rayo Vallecano con la convicción de que hay que ganar.

- Con una línea de tres mediocentros, el Celta se mostró más sólido el sábado que en otras ocasiones. ¿Tendrá continuidad esta fórmula?

- El entrenador tendrá que sacar sus conclusiones y los jugadores tendremos que estar preparados para coger sus ideas de la mejor manera, para que cuando te dé la oportunidad puedas plasmarla y que el equipo consiga resultados positivos. Lo que ahora importa es ganar partidos.

- Tras la derrota en Getafe, desapareció del equipo. Esta temporada apenas ha tenido continuidad. ¿Espera disfrutar de regularidad en lo que resta de curso tras lo realizado ante el Barça?

- Ojalá. Para mí sería importante, a estas alturas del campeonato y cuando el equipo se está jugando tanto, poder ayudar a que el Celta consiga la permanencia. Ese sería el final soñado para mí. Estaba entrenando bien y demostrando que podía aportar cosas al equipo. En los primeros partidos con Abel quedé fuera de la lista de convocados. Nunca decaí. Después vino la lesión y ahora he tenido la ocasión de poder jugar y demostrar que estoy ahí y que quiero ayudar al equipo.

- Álex López está a punto de recibir el alta médica. ¿Le resultará más complicado continuar en el once con la vuelta de su compañero?

- Siempre creo que puedo ser titular, esté quien esté o deje de estarlo. El míster decide quienes están mejor para jugar y eso tengo que aceptarlo.

- Por lo visto el sábado, parece que tiene muy buena química con Borja Oubiña, se complementan en el centro del campo.

- Sí, nuestra preocupación era estar bien colocados en el campo ante un rival tan difícil: cuando uno salía al ataque el otro intentaba cerrar espacios. Hubo buena comunicación entre nosotros. Me encontré bastante cómodo, sabiendo que el Barcelona te mueve mucho y nos tocó a todos hacer mucho trabajo oscuro.

- ¿Qué ha cambiado en el Celta para que dos mediocentros marquen en el mismo partido y de jugada?

- La clave estuvo en que tiramos más adelante las líneas, presionamos más al rival. Eso supone robar balones en campo contrario y que los centrocampistas pisen el área en determinadas jugadas, como nos ocurrió ante el Barcelona. Al presionar arriba estás mucho más cerca del área, ves la portería cerca y los esfuerzos son menores, aunque parezca lo contrario.

- ¿Y qué suponen estos goles para un equipo que lamentaba la ausencia por sanción de su máximo artillero?

- El equipo tiene que sobreponerse a esta baja porque está capacitado para ello y porque la situación lo demanda. Si queremos salvar la categoría tenemos que arrimar todos el hombro. El equipo tiene que explotar otras virtudes.

- De ahí, entonces, la importancia de esos goles ante el Barça para un equipo que podía generar dudas por la ausencia de Iago Aspas.

- Sí, claro, refuerzan nuestra moral. Si nos toca esforzarnos un poquito más para paliar la baja de este compañero lo hacemos, sin problemas, porque el equipo está capacitado para que cualquier jugador pueda aportar sus características en beneficio del bien común.

- - Insa marcando, estrenándose como goleador en Primera División.

- Fue una alegría muy grande. Quiero agradecer a mis compañeros y al club que me dieran la oportunidad de cumplir un sueño. Sobre todo vale para demostrarle al míster que estoy ahí y que puedo ayudar al equipo en este final de campeonato.

- La temporada pasada marcó el de la victoria del Celta en Tarragona que supuso el ascenso a Primera.

- Me siento muy feliz por marcar goles tan importantes para el Celta. Y de aquí al final de la temporada, ojalá que pueda ayudar al equipo con más goles y con mi trabajo para que veamos al Celta el año que viene en Primera División.

- ¿Con cuál se queda?

- Los dos son goles muy especiales: el del año pasado porque significó ascender y éste porque es mi primer gol en Primera y ante el Barcelona.

- ¿A quién fue dedicado el del sábado?

- A mis abuelos, que han sido unas personas especiales para mí y para mi hermano. Pensaba que el primer gol en Primera me gustaría dedicárselo a ellos, y así ha sido.

- ¿Recuerda cómo fue la jugada del gol a Pinto?

- Tuve la intuición de que el balón iba a caer por ahí porque Orellana iba muy forzado en la jugada. Tuve la suerte de que cayera en el sitio justo por donde yo entraba.

- ¿El estreno como goleador de Primera se parece a la jugada soñada para tan importante momento de un futbolista?

- Creo que sí. Estrenarse como goleador en Primera División ante un equipo como el Barcelona sí podríamos decir que es el gol soñado por un futbolista.

- Formó parte de la cantera del Valencia, club que pretende el fichaje de su compañero Iago Aspas. ¿Le parece un buen destino para el delantero del Celta?

- El Valencia es un gran club, con grandes jugadores y Iago ha demostrado durante esta temporada que también lo es. Pero él tiene que decidir su futuro. Como amigo y compañero le deseo todo lo mejor, esté donde esté el próximo año.