Los números del Celta en la segunda vuelta del campeonato lo han conducido directamente a los infiernos. Los célticos han sumado cinco puntos en las últimas nueve jornadas de Liga, de los 27 que estaban en juego. Por eso es el tercer peor equipo de Primera en el tramo de la temporada que comenzó a mediados de enero. Ese bagaje tan pobre le permite superar únicamente al Deportivo y al Zaragoza, que solo se han llevado cuatro puntos.

Pocos esperaban que el equipo vigués sufriese un descalabro tan grande en la segunda parte de la Liga. Tras un titubeante comienzo -perdió los dos primeros partidos, ante Málaga y Real Sociedad-, el Celta fue adaptándose a una competición en la que llamó la atención por su buen juego, aunque casi nunca estuviese acompañado de resultados positivos.

A pesar de que sus números eran escasos, el equipo que entrenaba Paco Herrera concluyó la primera vuelta del campeonato en la decimoquinta posición. Con 18 puntos en 19 jornadas había dejado por detrás a Osasuna, que cerraba la clasificación con 15, Deportivo, Granada, Mallorca y Espanyol. Por delante tenía al Athletic Club de Bilbao, con 21 puntos, uno menos que el Zaragoza.

En esa primera etapa de su retorno a la máxima categoría, el Celta había desperdiciado dos buenas ocasiones para crecer ante rivales a priori directos: Rayo Vallecano y Espanyol. Con los madrileños, desperdició dos goles en la primera mitad para llevarse tres puntos que le permitirían igualar a los de Paco Jémez en la clasificación con 13 puntos en la undécima jornada. Con los periquitos pasó algo parecido: el rival se hundía en la tabla si perdía con los célticos en Cornellá-El Prat. Con un gol de Sergio García, el conjunto de Javier Aguirre alcanzó a su rival en la clasificación. Con este duelo en Barcelona se ponía fin a la primera parte del campeonato.

De esa estancia en la Ciudad Condal, tras caer eliminado de la Copa del Rey, el Celta se llevaría una rémora que acabaría por dinamitar la estabilidad del vestuario. Jugadores como Aspas, Roberto Lago y Álex estaban pendientes de sus futuros contratos. A pesar de todo, el equipo conquistó un meritorio empate en Málaga y otro punto más en la visita de la Real Sociedad a Balaídos.

El comienzo de la segunda parte del campeonato había sido más fructífero que el de la primera. Pero a partir de ahí se produjo un pequeño cataclismo que acabó con la destitución de Herrera. La directiva perdió la paciencia después de tres derrotas consecutivas -ante Osasuna, Valencia y Getafe- y contrató a Abel Resino. El toledano se estrenó con victoria ante el Granada (2-1), pero los célticos han vuelto a repetir tres fracasos seguidos -Sevilla, Real Madrid y Deportivo-, que los ha dejado en la penúltima plaza de la clasificación.

Ahora la salvación está a tres puntos y la marca el Zaragoza, que lleva peor segunda vuelta que el equipo vigués. Los de Manolo Jiménez no conocen la victoria en las nueve jornadas de la segunda mitad de la Liga. Solamente han logrado cuatro empates: ante Espanyol, Málaga, Valencia y Granada.

Hasta la jornada anterior tampoco el Deportivo conocía la victoria en la segunda vuelta. El equipo coruñés solamente había sido capaz de empatar (0-0) con el Rayo Vallecano en Riazor. El viernes le ganó al Celta el clásico gallego, que le permite reducir a tres puntos las diferencias con los célticos.

La Real Sociedad, con 21 puntos, es el que más ha sumado en la segunda mitad de la Liga. Los donostiarras superan al dominador del campeonato, el Barcelona, que acumula 19 puntos en estas nueve jornadas.

Llamativa resulta la progresión del Espanyol, que contabiliza 17 puntos en este tramo de la competición. También Osasuna ha dado un estirón importante, al alcanzar los 13 puntos en este mismo periodo. Betis, con 9 puntos, y Levante, con 8, han cedido en su carrera hacia las posiciones altas de la tabla.

A béticos y valencianos, como le ha ocurrido al Celta, se les ha atragantado la segunda vuelta del campeonato. También el Rayo Vallecano ha perdido empuje en la tabla en la recta final del campeonato. El equipo de Jémez lleva 10 puntos, que le situarían seis puestos por debajo del sexto que alcanzó en el ecuador del campeonato.

El Granada, que también había acabado por detrás del Celta en la primera mitad de la Liga, ha mejorado sus números. Tras empatar ayer con el Levante, el conjunto andaluz ha obtenido once puntos en nueve jornadas. Los de Alcaraz se alejan así de la zona caliente de la clasificación, en la que el Celta pelea por no irse de nuevo al pozo de Segunda.