Aspas y Riki compartirán hoy terreno de juego, pero apenas cruzarán sus caminos. Vivirán a más de cincuenta metros un duelo que será determinante en el destino del partido y que de paso podría servir para que rompan el empate a diez goles que existe en estos momentos entre ambos. Están entre los primeros goleadores del fútbol español. Enrolados en dos conjuntos con evidentes problemas de cara a la portería contraria estremece pensar lo que podría ser de Deportivo y Celta sin el acierto que han mostrado estos dos futbolistas, tan diferentes entre ellos.

Riki ha marcado el 35% de los goles del Deportivo en lo que va de temporada. Solo Pizzi, con siete tantos, mantiene un elevado pulso goleador con el madrileño dentro de su propio vestuario. La dependencia del Celta con Iago Aspas es si cabe un poco más grande. El de Moaña anota el 38,5% de los goles del club vigués y el siguiente anotador celeste marcha con cuatro tantos. Ante estos datos cuesta trabajo creer que en una reunión entre los dos cuadros gallegos no vaya a ser alguno de ellos quien desnivele el encuentro dado el enorme peso que tienen en las áreas rivales.

Riki llega a la cita descansado tras no jugar el partido de la semana pasada ante el Barcelona a cuenta del problema muscular que estuvo cerca de comprometer su presencia esta noche. En los derbis su buen desesmpeño está casi garantizado. Juega esta clase de encuentros con un nivel de concentración muy alto y sus tablas en la élite le ayudan en esta clase de encuentros. Iago Aspas aparece en el derbi en plena ascensión tras haber pasado un evidente bache hace pocas semanas. Sus prestaciones empiezan a ser similares a las del arranque de la temporada y ante el Real Madrid hace unos días volvió a verse al jugador incisivo y peligroso que esta temporada se ha convertido en una sensación en Primera. Queda pendiente su capacidad para adaptarse al ambiente de Riazor. Hace un año estuvo más que correcto, aunque le sigue faltando ese partido redondo.

Una cosa les diferencia en los derbis y es que Riki ya sabe lo que es marcarle al eterno rival mientras que Iago Aspas persigue aún ese gol con el que sueña desde hace mucho tiempo. Puede que la de esta noche sea su última oportunidad si se confirma que a final de temporada abandona el Celta. Nunca se perdonaría marcharse sin disfrutar de ese instante de gloria. Para el moañés la jornada podría ser redonda si unas horas antes Vicente Del Bosque le incluye en la lista de convocados por la selección para los próximos encuentros internacionales. Es algo que en los últimos meses siempre sobrevuela la vida de Iago cuando toca convocatoria. No parece que el técnico salmantino vaya a tomar esa decisión aunque ya nada se puede descartar en este fútbol tan especial.