El Celta tiró de savia nueva para resolver un complicado compromiso en un momento de necesidad. El equipo de Herrera superó con autoridad y finura al experimentado Getafe y certificó, con protagonismo y goles de los recién llegados, un segundo triunfo que le concede un respiro a pocas semanas de que el calendario comience a empinarse.

El partido ante los azulones, que siguen contando por derrotas sus visitas a Balaídos, dejó un puñado de buenas noticias y alguna que otra pega. La firme apuesta del Celta por la pelota, su verticalidad y ambición sugieren una rápida adaptación a la categoría. El cuadro celeste muestra también en Primera División personalidad y desenvoltura. Los nuevos han asimilado muy pronto el estilo de juego y han proporcionado el salto de calidad necesario para competir con los mejores. Aunque sólo ha ganado dos partidos, el Celta ha superado en el juego a cuatro de los cinco rivales a los que se ha enfrentado.

Le falta acaso al grupo de Herrera instinto asesino para rentabilizar su capital futbolístico -demasiadas ocasiones claras dilapidadas en el primer tiempo- y templanza en momentos puntuales para manejar el ritmo del partido. La respuesta del Getafe al gol de Augusto tras conceder dos ocasiones muy claras en dos minutos denota blandura.

Trío de ases

El solvente partido firmado en general por el Celta -todos fueron igualmente partícipes del triunfo- no restó brillo al buen desempeño de los fichajes, especialmente de los dos hombres de banda, el talentoso Augusto Fernández, que estrenó cuenta goleadora, y Krohn-Dehli, una pesadilla para los azulones. El danés fue un puñal por su banda. Aprovechó el mínimo resquicio para armar la contra, colaboró a la hora de achicar el espacio y asistió con maestría a Augusto y a Park en los dos goles.

No menos fulgurante fue la irrupción del mediático Park, todo un ídolo en su país, que no ha tardado más que un par de minutos en meterse en el bolsillo a Balaídos anotando el gol de la victoria en el primer balón que tocaba. Un formidable remate al templado centro de Krohn-Dehli que hizo estremecerse el coliseo vigués. Y aun tuvo tiempo el surcoreano cortejar un segundo tanto en una gran acción individual que engatilló mal y no encontró portería.

Once casi fijos

La sospecha de que Herrera tiene ya definido su once tipo casi ha devenido en certeza. Diez futbolistas son fijos desde hace ya un par de jornadas y Park parece llamado a convertirse en el undécimo hombre.

El hecho de que la alineación del Celta pueda recitarse pronto de carrerilla no va restar sin embargo demasiado peso en el equipo a futbolistas, como De Lucas, Bermejo, Natxo Insa o Toni. Todos ellos y alguno más van a tener protagonismo esta temporada.

La fulgurante irrupción de Parik, la energía de Krohn-Dehli o la habilidad en el regate de Augusto no desmerecieron, en este sentido, el inmenso trabajo de Bermejo (que no atinó con la portería, pero proporcionó sentido al juego), el austero equilibrio que Insa inyectó al medio campo o la ambición y el desparpajo de Toni en los minutos finales.