El nadador redondelano David Blanco rompió ayer todos los pronósticos y ganó con un tiempo espectacular la primera edición de La Batalla de Rande a nado, una carrera de 27 kilómetros entre las Cíes y la Isla de San Simón, considerada una de las más exigentes de Europa. También se rompieron los pronósticos climatológicos y la prueba se celebró en las mejores condiciones posibles desde el punto de vista del viento, corrientes, mareas y temperatura del agua. Esto propició que los competidores vieran mejoradas sus espectativas iniciales en un mínimo de una hora.

David Blanco, que se entrena en el Club Náutico de Vigo, era el único menor de edad de la prueba, en una disciplina de ultrafondo en la que los podios se reservan a competidores de más edad, con una gran madurez y fuerza mental para soportar el constante esfuerzo. De hecho, la edad media era de 35 años.

El joven de Cesantes voló sobre las olas de la Ría y paró su cronómetro en unos increíbles 5:41:01. Este tiempo representa una velocidad media de 1:16 cada cien metros durante los 27 kilómetros. Los ourensanos Marcos Vila (5.53.58) y Alberto Taboada (5.54.01) completaron el podio. Ambos llegaron juntos a la meta, pero Vila logró auparse al segundo cajón gracias a tan sólo tres décimas.

La primera mujer en el podio fue la barcelonesa Minerva Pujol, con un tiempo de 6:06:36 y una media cada cien metros de 1.21. El tiempo de la catalana ha sido extraordinario: es el séptimo mejor tiempo de todos los participantes en esta competición, en la que solo se registró un abandono, lo que pone de relieve el altísimo nivel de los atletas participantes.

La prueba comenzó en la playa de Rodas a las 10.00 y los nadadores estuvieron acompañados por una gran flota de apoyo que se encargaba del avituallamiento. El último participante en llegar a la ista de San Simón invirtió 8:10:36, con una media cada cien metros de 1:49.

Clasificación