La participación de Borja Oubiña en el importante compromiso liguero del próximo sábado en El Alcoraz se mantiene en suspenso. La resonancia magnética practicada ayer al capitán celeste no ha servido para despejar del todo las dudas sobre su lesión muscular, que arroja aún algún punto oscuro.

El jefe de los servicios médicos del Celta, Juan José García Cota, explicó anoche –la prueba se realizó por la mañana pero los resultados no se conocieron hasta bien entrada la tarde– que el desgarro muscular sufrido por el jugador en el parte anterior de su muslo izquierdo esta "prácticamente cicatrizado" pero la resonancia muestra "un mínimo enema de 1,3 milímetros" que invita a la prudencia.

Borja Oubiña no está descartado para Huesca pero tampoco se puede dar por hecha su participación en el choque frente a los azulgrana. El jugador se incorporará hoy de forma progresiva a los entrenamientos con el grupo y su concurso en el partido del sábado va a depender de la evolución del futbolista en los próximas 72 horas. Es decir que recibirá o no el alta médica en función de sus sensaciones en los próximos entrenamientos. Si no son del todo buenas, el medio centro no se arriesgará a sufrir una recaída.

El capitán del Celta se lesionó durante el partido jugado hace tres semanas en Balaídos ante el Almería. Los servicios médicos pronosticaron un periodo de recuperación de entre tres y cuatro semanas, con lo que Oubiña está dentro de los plazos de recuperación fijados.

El otro foco de atención de la enfermería se centra en el portero Yoel Rodríguez, cuya participación en el choque es incluso más necesaria que la de Oubiña debido a la marcha con la selección sub 17 del portero del filial Rubén Blanco y a la imposibilidad de que Sergio pueda ser suplido por Queco Piña.

El guardameta vigués será sometido hoy a una ecografía que permitirá determinar si su lesión en el tendón directo de su muslo izquierdo está ya curada. A la espera de conocer el resultado de la prueba, los médicos creen que podrá viajar a Huesca, aunque no estará al cien por cien si tiene que jugar.