El Celta B cerró su partido ante el Sporting B con cara de circunstancias y un punto doblemente amargo. En primer lugar porque los de Fonsi Valverde hicieron más méritos que el filial gijonés para encadenar su tercera victoria consecutiva. En segundo lugar, y especialmente, por la espeluznante lesión sufrida por Rubén Martínez en un fortísimo golpe con Juan Muñiz.

El partido en sí no fue bueno. La disposición táctica planteada por el ex céltico Manolo, con un dibujo 4-1-4-1, obligaba a su cuarteto de mediapuntas a trabajar mucho en la presión y dificultaba la salida con el balón jugado de los vigueses. Mientras, Fonsi Valverde pagaba con la misma moneda y Camochu, Jota, Rubén Martínez y Marcos Torres se encargaban de que el Sporting B tampoco pudiese combinar.

Por eso, hasta el minuto quince no se vivió la primera aproximación al área. La acción pudo haber acabado en gol de no haber sido porque Guerrero no acertó a rematar un excelente servicio de Muñiz.

El Celta B, por su parte, no avisó. Jota inició una veloz contra abriendo a la derecha a la llegada de Camochu y éste sacó un preciso centro que el máximo goleador de la categoría cabeceó al fondo de la portería defendida por Raúl Domínguez.

El tanto sirvió para que los locales se asentasen en su juego y empezasen a encontrar huecos entre el entramado defensivo visitante. Así pudo llegar la sentencia. Levy conectó un gran pase interior para Rubén, quien, con un sutil toque, dejó a Camochu solo ante el meta visitante. Pero el delantero céltico no acertó en la definición y desperdició la ocasión.

El técnico asturiano buscó soluciones en el intermedio y realizó un doble cambio, dando entrada a Barrera y Mendy en sustitución de Cruz y Jara. Pero el filial céltico continuaba llevando la iniciativa y llegó a desperdiciar ocasiones claras para sentenciar. Mendy justificó su salida al campo con una velocísima internada por la banda derecha y un tiro cruzado ante el que nada pudo hacer Matías para evitar la igualada (1-1, min.52).

Así se consumían los minutos sin muchas más novedades hasta que llegó la acción que hizo enmudecer en primer lugar a Barreiro para posteriormente pasar a recriminar a los jugadores del Sporting al confirmarse la gravedad de la lesión de Rubén Martínez (min.81), quien tuvo que ser evacuado en ambulancia al Hospital de Fátima. Como el Celta B ya había realizado los tres cambios y Juan Muñiz fue expulsado por esa acción, los últimos minutos se disputaron con ambos equipos con sólo diez jugadores sobre el campo.