El Celta se la ha jugado a una carta en el lateral izquierdo y pagará su delgadez en la próxima jornada. La expulsión de Roberto Lago por doble tarjeta provocará un corrimiento de tierras en la defensa. Hugo Mallo cambiará de banda. Murillo entrará en la derecha. Pese a todo, el inminente sancionado pronostica: "El que salga lo hará bien".

Lago evalúa su caso: "La primera tarjeta es. La segunda se produce en una jugada sin intención de cometer falta ni cortar el juego, es un choque fortuito. Pero es la interpretación de árbitro. Me fastidia. Tenemos un partido muy importante ante el Betis".

Pino Zamorano fue burocrático en la redacción del acta. Tiró de formulismos. Tapa resquicios al recurso, que el club probablemente ni presente. Lago no tiene recambio directo. Bolteho se fue y nadie ocupó su vacío. Víctor Fernández, fichado para compatir filial y primer equipo, acaba de ser operado del tobillo. "Quizás en defensa estamos un poco justos", admite Lago. "En mi demarcación puede jugar Hugo. Lo ha hecho muchas veces y lo ha hecho bien. No debe preocupar".