El Club Vigo de Voleibol regresa a su pasado. De nuevo en la carretera. Casi dos mil kilómetros en autocar tendrán que afrontar sus doce jugadores, el entrenador y el segundo técnico para disputar el segundo encuentro en la Superliga ante el Cajasol, que será mañana a partir de las 12.00 horas en Sevilla.

La plantilla se subió ayer a medianoche en un autobús. Llegarán hoy por la mañana tras horas de largo viaje y después se entrenarán. Jugarán a la mañana siguiente y, a continuación, regresarán de nuevo por carretera hacia Vigo.

Parece una historia sacada de antaño, pero es la realidad de un club agobiado por los problemas económicos. No tiene un patrocinador que le respalde desde hace más de tres años.

Después de estar en la Superliga 2, de renovar casi a la totalidad de su plantilla ajustando los gastos al máximo y de perder el primer encuentro ante el Palma por un contundente 0-3 en su estreno en Coia, los vigueses se encontrarán en Sevilla con el Cajasol, con el que compitieron la pasada temporada.

El Vigo se llevó el título de campeón de la Superliga 2 por delante de los andaluces, a los que también arrebataron la Copa Príncipe de Asturias. El Cajasol, sin embargo, ha comenzado el presente ejercicio con un triunfo en Tarragona.

El Club Vigo es penúltimo en la clasificación provisional de la Superliga, pero su estructura se mantiene inalterable como hace unos años.

Guillermo Touza, el presidente, y muchos otros, todavía se acuerdan de los rocambolescos viajes en autocar, tren o coches particulares para jugar los partidos. Eso a pesar de que estaban también en la máxima categoría. Ahora vuelven esos recuerdos pero en la realidad. No hay presupuesto para desplazarse en avión y en este caso incluso se ahorran una noche de hotel.

Todo ese esfuerzo se realiza por mantener un equipo en la Superliga de Voleibol, la máxima categoría. La entidad que más temporadas lleva en la competición también se resiente de la crisis. Mañana tendrá la misión de no acusar ese esfuerzo extraordinario, pero también el de mejorar su imagen deportiva. Ante el Palma sucumbió de forma clara y por eso el entrenador ha intensificado la preparación. El duelo parece importante para ambos, que teóricamente lucharán por la permanencia hasta el final del campeonato.

Supervivencia

En el caso del Vigo, también luchará por la supervivencia. Algo que debe afrontar en el futuro más próximo con cierta urgencia. La entidad trata de superar el ‘temporal’ con cierta resignación. El regreso a la élite vuelve a ser duro para un club peculiar.