"Yo no soy ningún héroe", anuncia David Gil, que hoy emprende desde la explanada del Náutico de Vigo una marcha con la que pretende concienciar a la sociedad sobre la donación de médula ósea, un procedimiento que podría salvar la vida de muchas personas en todo el mundo.

Y es que no hace falta ser un héroe para salvar vidas. Solamente hace falta tener un corazón altruista y una fuerza de voluntad tan grande capaz de remover conciencias a través del deporte. Y David Gil tiene ambas cualidades. Hace un año, también el 12 de junio, emprendió una marcha de 500 kilómetros por toda Galicia, visitando los siete hospitales de las principales ciudades gallegas –Vigo, Pontevedra, Santiago, A Coruña, Ferrol, Lugo y Ourense– con el lema "700 camisetas contra la leucemia", entregando 100 camisetas en cada uno de los hospitales mencionados para ser entregadas a los próximos 700 donantes de médula ósea. Ha pasado un año y David Gil no quiere que esa iniciativa caiga en el olvido. Esta vez realizará una marcha de 33 kilómetros entre Vigo y Pontevedra en la que no estará solo. Le acompañarán unas 60 personas del Club Metropolitan, en el que trabaja, y también el sordo-ciego Gerardo Fernández, junto a Javier Pitillas (con el que completó el Camino de Santiago desde Roncesvalles hace unos meses).

La fecha también es especial para él. "Coincide con el cumpleaños de mi hermano", cuenta, que falleció en 2005 a causa de una leucemia linfoblástica aguda. La fatalidad que azotó su vida le hizo iniciar una cruzada para "sensibilizar a la sociedad". "la donación de médula ósea y la de sangre del cordón umbilical es la gran desconocida de las donaciones", explica David Gil. "Se trata de una donación en vida que puede salvar a muchas personas". Este deportista ha emprendido una marcha "informativa por la vida".

"Hay mucha gente que podría salvarse si encontrara un donante compatible", anuncia. Formar parte del registro de donantes de médula ósea no emparentados es un acto altruista y generoso que podría permitir a cualquier persona de 18 a 55 años salvar una vida. "En el registro te hacen simplemente un análisis de sangre. Luego te pueden llamar si eres compatible con cualquier persona del mundo", explica.

El Centro de Transfusiones de Galicia se encarga del registro de donantes en Galicia, pero David Gil no posee datos específicos de cuántos donantes ha generado su campaña iniciada el pasado año. "La evidencia y los números nos dicen que muchas de esas camisetas todavía permanecen en los hospitales", dice. El único dato que le han facilitado es que de junio a septiembre se han añadido 82 donaciones en este "registro universal". Pero para David Gil este dato no es suficiente, ya que "es el cómputo que ya se venía manejando de unas veinte donaciones cada mes", explica. Así que hoy volverá a la carretera para dar un nuevo impulso a su lucha solidaria.

A partir de las 8.30 horas (para los que decidan hacer el recorrido andando) y de las 9.30 para los que se atrevan a completar los 33 kilómetros corriendo, la solidaridad volverá a ser protagonista de una jornada atlética. El Club Metropolitan apoya la iniciativa incluyéndola como una de sus actividades al aire libre (se programa una cada mes). El apoyo de la gente es fundamental para este vigués al que le rondan mil ideas por la cabeza para seguir llevando a cabo su cruzada: "Ver que están ahí, apoyándote, te da muchas fuerzas". Pero no tendrá compañía sólo en la carretera. También se ha creado un grupo en facebook (700 camisetas contra la leucemia) que posee más de 6.300 animadores y a través del que se podrá seguir la prueba de hoy hasta la llegada a la Plaza de la Peregrina. "¡Que corra la sangre!".