La Roda, rival del Coruxo en la final de la fase de ascenso a Segunda División B, es un equipo de reciente creación que cuenta con tan sólo once años de historia. De esos años, los últimos ocho ha estado en Tercera División, y el título conseguido este año es su mayor logro deportivo.

La Roda es un pueblo de 16.000 habitantes situado en el norte de la provincia de Albacete. El equipo juega en el campo municipal de deportes con capacidad para 3.000 aficionados. El terreno de juego es de hierba natural con unas buenas dimensiones, 103x68, lo que ayuda al juego del conjunto vigués, que está acostumbrados a las dimensiones de O Vao. Para los aficionados que la próxima semana quieran viajar para apoyar el Coruxo, deben saber que La Roda está ciento dieciséis kilómetros más lejos que Oyón, con lo que las siete horas de viaje que hicieron este fin de semana deberán ampliarlas una más si quieren viajar a La Roda. Además hay que tener en cuenta que casi con toda seguridad el partido de vuelta se juegue el sábado 19.

El conjunto albaceteño militó en el grupo 18 de Castilla La Mancha, finalizando la temporada en primera posición con setenta y siete puntos, nueve más que el segundo clasificado que fue el Illescas. Como todos los grupos, La Roda jugó dos partidos más que el cuadro vigués, consiguiendo 23 victorias (tres menos que los vigueses), ocho empates (cuatro más que el Coruxo), y siete derrotas (por seis el cuadro de O Vao). La mayor diferencia está en la faceta goleadora, en donde han hecho 71 goles por 54 los vigueses, aunque los dos equipos han encajado el mismo número de goles, 32. La Roda jugó una vez la fase de ascenso, al quedar cuarto en la temporada 2003/2004. En primera ronda se eliminó con el Granada, ganando en La Roda 1-0 y perdiendo 3-2 en Granada. En la ronda final empató a cero en casa con el Diter Zafra, y perdió por la mínima en el partido de vuelta.

El domingo pasado ante el Amorebieta, el conjunto albaceteño pasó muchos apuros para conseguir la clasificación, que le llegó en el tiempo de descuento merced al tanto marcado por Carlos Alfaro en el tiempo de descuento. Espínola y el propio Carlos Alfaro son los hombres que llevan el peso del equipo. Frenarlos será el primer trabajo de los jugadores vigueses si quieren hacerse con el control del juego. José Mari, en el centro del campo, es otro de los hombres que hace un trabajo sacrificado pero que el equipo lo necesita para llegar a la zona de arriba. Su hombre gol, Pierrick, está atravesando por un momento de poco acierto de cara al gol, pero sus compañeros están supliendo esta sequía goleadora.

En La Roda se ven como ganadores de la eliminatoria, hecho al que desde Vigo se quiere restar importancia, tal y como sucedió en las dos eliminatorias anteriores. Los vigueses saben que el partido del domingo, a las 18.30 horas en el campo de O Vao, es fundamental para pensar en el ascenso, tal y como ha sucedido hasta este momento.

Desde el club ya se ha comenzado a trabajar pensando en el partido del próximo domingo. A lo largo del día de hoy se espera que se conozcan el precio de las entradas, pero lo más seguro que no sufrirán variación con respecto a las otras dos eliminatorias.