A Túñez le ha dado un vuelco la vida en unas semanas. Las buenas noticias le llegan sin tiempo apenas para asimilarlas y disfrutarlas. Desde que irrumpió con el Celta en las eliminatorias de la Copa del Rey no ha dejado de recibir alegrías inesperadas. Antes de concluir 2009, el club le renueva y le mejora el contrato; a finales de enero, Eusebio le notifica que es jugador a todos los efectos de la primera plantilla; hace tres semanas se estrena como titular en la Liga ante el Salamanca; y si todo ello no fuera suficiente, ayer supo que Venezuela le quiere en su selección de fútbol. En un mes escaso, el zaguero céltico podría pasar de jugar en Barreiro con el filial celeste a defender al país suramericano donde trabajaron sus padres y donde él nació en 1987. La decisión está en su mano, ya que ha sido invitado a disputar un partido amistoso con la Vinotinto.

La federación venezolana se ha fijado en el defensa central del Celta, después de que Fernando Amorebieta, que juega en su misma posición en el Athlétic de Bilbao, renunciase al equipo nacional del país que acogió a sus padres para decantarse definitivamente por la Roja, con la que fue internacional en las categorías menores y ya fue llamado en una ocasión por el seleccionador absoluto, Vicente del Bosque.

Andrés José Túñez Arceo también posee, como Amorebieta, pasaporte venezolano y español, pues nació en Caracas y hasta los siete años no se mudó a la parroquia de Bertamiráns, en el ayuntamiento de Ames, colindante con Santiago, de donde habían partido sus padres para la emigración.

El futbolista conoció en la mañana de ayer, a través de su representante, el interés de que forme parte de la selección de Venezuela. Dispone de unos días para pensárselo, antes de que su agente viaje a Madrid para mantener la reunión prevista con el representante de esta federación hispanoamericana.

El seleccionador César Farías quiere aprovechar alguno de los tres partidos amistosos que tiene concertados para el mes de marzo para que debute Túñez como internacional. Si acepta la propuesta, el defensa del Celta podría jugar el día 3 ante Panamá, el 6 frente a Corea del Norte o el 31 contra Chile, en la capital chilena.

La proyección profesional de Túñez puede dispararse si responde afirmativamente al país de acogida de sus progenitores. Tras el escaparate que supuso el enfrentamiento en la Copa del Rey ante el Villarreal y, sobre todo, frente al Atlético de Madrid, ahora puede llegarle el de una selección suramericana que nunca se clasificó para una fase final de la Copa del Mundo pero que confía en dar un salto de calidad importante con la base del equipo Sub 20 que acudió al Mundial de Egipto.