El español Jorge Lorenzo (Yamaha) dijo hoy en Sepang (Malasia), después de ser el más rápido en los entrenamientos libres, que pocas veces esta temporada había tenido tantas ganas de volver a subirse a la moto como hoy en el Gran Premio de Malasia tras su caída del domingo en Australia.
Lorenzo, que todavía tiene posibilidades de ganar el Mundial de MotoGP, declaró a los periodistas: "la verdad es que tenía muchas ganas de subirme a la moto y cuando he llegado al 'box' a falta de diez minutos deseaba que pasaran pronto. Pocas veces he tenido tantas ganas esta temporada de volver a subirme a la moto".
Sobre su dedo, herido en la caída de Phillip Island, en la primera vuelta del gran Premio de Australia, señaló: "me molesta bastante y ha empeorado con la humedad. Es un dolor continuo en las frenadas y las aceleraciones. Veremos qué me dicen en la clínica".
Respecto a su primera posición de hoy manifestó: "hay que valorar bien un primer puesto, aunque lo importante es mañana y la carrera" y reveló que su rival, compañero de equipo y líder del mundial, el italiano Valentino Rossi, cuarto en los libres de Malasia, ha estado a su nivel, pero no ha puesto el neumático blando que él sí ha usado en las últimas vueltas.
Ayer, Rossi elogió el carácter y la determinación de Lorenzo. "Los Lorenzo somos así; es el único punto positivo que tenemos. Tenemos un carácter muy fuerte: para algunas cosas no es positivo, pero para el esfuerzo y la competitividad sí", consideró.
"El secreto para no darme por vencido es no pensar en el pasado, el pasado no es nada. Este es mi secreto: no pensar en el pasado", manifestó.
También se pronunció sobre la táctica de Rossi en la prueba del próximo domingo en la que le vale entrar entre los cuatro primeros para sumar su noveno título mundial. "El campeón siempre quiere vencer ganando la carrera, esto siempre lo ha hecho Valentino, pero no sé lo que pasará en la carrera", señaló.
