El Rápido de Bouzas consiguió ayer en Mareo una de esas victorias que valen seis puntos. Además fue la primera victoria de la temporada para los boucenses, que ayer finalizaban con el fortísimo comienzo de temporada que tuvieron.

El Rápido de ayer fue diferente al de los cuatro primeros partidos de campeonato. Alex, técnico del Rápido, coloco a Gledi en el centro de la punta de ataque, situando a Zurdo como extremo izquierdo. La apuesta fue acertada, ya que el albanés consiguió que los centrales se tuvieran que juntar más para evitar el peligro, consiguiendo que los extremos vigueses pudieran entrar por las bandas con mucho más peligro.

Así, a la media hora de juego, Óscar cogió un balón dentro del área asturiana y consiguió el primer tanto.

El Sporting buscó aire para su juego ofensivo con la entrada de Guillermo, primero, y Alex después. Las jugadas de peligro se sucedieron sobre el área viguesa, pero en esta ocasión Luis estuvo inmenso bajo los palos, despejando todo el peligro que llegaba a su zona.

Al Rápido le vino bien la decidida apuesta de los asturianos por conseguir la victoria. A los de Alex le gusta jugar a la contra, y ayer se aprovechó de esa circunstancia.

A los pocos minutos de iniciarse la segunda parte, llegó el segundo de Óscar, tanto que a la postre sería el definitivo.

Los boucenses sabían que hasta el resto del encuentro les esperaba un auténtico infierno, pues para los asturianos supondría la segunda derrota consecutiva, primera en su cancha, ante un equipo que llegaba en la última posición.

En esos minutos finales, Luis volvió a estar a un gran nivel con buenas intervenciones. A medida que se acercaba el final del encuentro, el Rápido no quiso especular y se defendió como pudo. Con esta victoria, el Rápido inicia ahora su particular competición.