Barcelona 0

Víctor Valdés; Alves, Márquez (Puyol, m.50), Piqué, Abidal; Touré, Xavi, Iniesta, Messi, Eto’o (Bojan, m.82) y Henry (Hleb, m.87).

Chelsea 0

Cech; Ivanovic, Terry, Alex, Bosingwa; Ballack (Anelka, m.90 5), Obi Mikel, Essien, Lampard (Belletti, m.71), Malouda; y Drogba.

Árbitro:

Wolfgang Stark (ALE). Mostró cartulina amarilla a Alex (m.25), Ballack (m.29), Touré Yayá (m.37) y a Puyol (m.74).

Incidencias:

Asistieron al encuentro 95.231 espectadores, en partido correspondiente a la ida de las semifinales de la Liga de Campeones, disputado en el Camp Nou.

Como hace un año, cuando empató sin goles ante el Manchester United en el Camp Nou, en las semifinales de la Liga de Campeones, el Barca repitió resultado ayer ante el Chelsea (0-0), en un partido en el que los de Pep Guardiola merecieron mejor suerte ante un ultradefensivo equipo londinense.

Al Barca, ayer le faltó más puntería que intención. Tuvo sus opciones, curiosamente cuando el partido agonizaba y se había convertido en un continuo ida y vuelta, algo que no quería Guardiola.

A los puntos, ganó el conjunto azulgrana, que en los minutos finales tuvo tres grandes ocasiones, de Bojan, de Hleb y de Alves para desequilibrar el partido, pero no acertaron y se quedaron sin marcar en casa un año después. La anterior ocasión fue precisamente ese partido ante el Manchester United.

El guión del partido no admitió dudas desde el primer minuto. Fútbol primitivo frente a creatividad. Balonazos de Cech, que fue el jugador del Chelsea que prácticamente más tocó la pelota, como recurso para crear juego.

Balones a la cabeza de Drogba desde 80 metros, un fútbol miedoso, el alegre estilo de Guus Hiddink se quedó en el olvido, temeroso seguramente por los vídeos, los que vio con las exhibiciones frente al Olympique de Lyon o el Bayern de Múnich.

Por eso, el Chelsea fue un equipo menor desde el primer minuto, en el que decidió marcajes individuales sobre Xavi e Iniesta; dobles sobre Messi, una tupida red cerrada en torno a Alex y Terry y en ocasiones hasta once futbolistas merodeando su área propia.

El Barca, fiel a su estilo, lo buscó desde el primer minuto, en el que Eto’o estuvo a punto de marcar, pero pronto se vio que a los azulgrana les faltaba precisión, les sobraba un toque en cada acción.

Con sólo un equipo sobre el terreno de juego, el Barça precisaba pausa, mucha paciencia. Sin que los múltiples recursos funcionaran, Andrés Iniesta fue el más clarividente.

La idea de Hiddink era desesperar al rival y lo consiguió, hasta el punto que en un error de Márquez, Víctor Valdés se erigió en el protagonista del primer tiempo. El meta salvó dos ocasiones de forma consecutiva con Drogba como protagonista

En la segunda se acumularon las malas noticias para el Barça. Márquez (m.50) tuvo que retirarse lesionado y Puyol fue amonestado y no podrá jugar en Londres. Los azulgrana perdieron ritmo de juego. A pesar de la evidente falta de ideas, lo siguió buscando el conjunto blaugrana. Derrrengado, agotado, el equipo de Guardiola buscó soluciones con la entrada de Bojan y Hleb por Eto’o y Henry, pero ayer no era el día de los azulgrana. El equipo catalán hacía 364 días que no finalizaba un partido en el Camp Nou sin marcar, el último es un mal precedente: el 0-0 ante el Manchester United en la ida y el tanto de Scholes en Old Trafford dejó después al Barça sin final de la Liga de Campeones.