El Rápido de Bouzas sigue haciéndose fuerte en el Baltasar Pujales, donde no conoce la derrota desde la décimo séptima jornada, cuando cayó ante el Somozas (0-1). Ocho jornadas sin perder, con cinco victorias y tres empates, han permitido al conjunto de Pablo Díaz respirar en la tabla clasificatoria y contar ya con un interesante colchón de siete puntos respecto a los puestos de descenso a falta de cinco jornadas. Y eso que en esta ocasión la cita no era sencilla ya que recibían al cuarto clasificado, el Cerceda. Sin embargo, un tempranero gol de Jaco permitió a los locales controlar el encuentro y apostar por el contragolpe como medio para cerrarlo, de nuevo por medio de Jaco. Sólo un tanto de penalti de los visitantes dio algo de emoción a los instantes finales.

El partido pronto se puso de cara para los boucenses. Un saque de banda de Cristian sobre el área del Cerceda cayó a pies de Jaco, quien con una semi-chilena consiguió batir a Cristopher e inaugurar el marcador cuando aún no se había cumplido el minuto 5 de juego.

El tanto obligó al Cerceda a asumir el peso del partido, con un rival muy bien posicionado y esperando su opción al contragolpe.

La decoración del partido no pareció variar lo más mínimo en la segunda parte, hasta el minuto diez. Una recuperación en mediocampo de Noé permitió a Felipe recibir dentro del área boucense. El delantero del Cerceda amagó el disparo y cedió para Adolfo pero, con todo a su favor para marcar, disparó fuera.

La resolución se hizo esperar hasta el minuto 83. Cristian sirvió el enésimo balón en largo para Jaco. El delantero boucense trató de regatear al último defensor, pero perdió el balón, que cayó a pies de Víctor. El mediocentro del Rápido, hasta entonces bastante desdibujado, se sacó de la manga un preciso pase para el propio Jaco, quien no perdonó el mano a mano con el meta visitante.

El 2-0 en el minuto 83 parecía dejar sentenciado el encuentro y así habría sido si, en un córner, el árbitro no hubiese señalado penalti por mano de Ita. Felipe se encargó de transformarlo (2-1, min.88) y dar algo de emoción a los instantes finales.