El Real Madrid sacó adelante, sin aspavientos y sin brillantez, la visita del Valladolid, amparado sólo por el talento individual de algunos jugadores, como el argentino Gonzalo Higuaín, que propiciaron un triunfo fundamental para mantener la estela del líder y la fe en sus posibilidades en la Liga.

El Real Madrid se ha acostumbrado a transitar sobre el alambre. A convivir con la incertidumbre. No dio aspecto de campeón. Y sólo el empuje del atacante argentino, el oportunismo de Raúl o la definición de Arjen Robben alimentaron las razones de su triunfo.

Juande Ramos decidió afrontar la visita del Valladolid con todo. Prescindió del argentino Fernando Gago, un fijo hasta ahora en la medular. Y situó al lado del francés Lassana Diarra, anclado en la titularidad, al holandés Wesley Sneijder. Más movilidad de balón. Más ataque. A partir de ahí, todo futbolistas con la mirada hacia adelante. Arjen Robben, recuperado, el argentino Gonzalo Higuaín tendido a la derecha. Raúl y Huntelaar.

Precauciones

Alertado por el recuerdo del 7-0 encajado en el Bernabeu hace un año, el Valladolid mantuvo una firme compostura. No disparó a puerta el Real Madrid hasta el minuto diez. Desde fuera del área, Sneijder, sin inquietar a Sergio Asenjo.

De hecho, la ocasión más clara pudo ser visitante. Aunque anulada por fuera de juego, la falta lanzada por Pedro León alertó al Madrid de las facilidades que empezó a proporcionar al adversario.

Entre Pepe y Casillas sacaron un balón que se colaba a la media hora. Los pitos empezaron a sonar en la grada.

En el tramo final del primer tiempo apretó el bloque de Juande. Fue en una acción aislada de Higuaín que salvó Asenjo. No pudo hacer lo mismo el meta en la siguiente. Otra jugada generada por el delantero argentino, de largo, el futbolista más enchufado a su equipo. Encontró el camino entre dos zagueros y su centro lo aprovechó Raúl para marcar.

Sólo la entrada de Guti a la hora de partido produjo cierto estruendo en la grada. Le acompañó Gago, por Cannavaro. Y Juande trastocó toda la zaga. Con Lass a la derecha, Torres a la izquierda y Heinze en el centro con Pepe.

Robben pudo sentenciar en una contra encauzada por Higuaín. Pero echó el balón fuera. Igual que el argentino Damián Ariel “Pichi” Escudero, que pudo lograr el empate con un cabezazo marrado.

Fue en un pase de Guti donde el Real Madrid se apartó del alambre y cerró el partido. Robben aprovechó el centro y batió a Asenjo para mantener al cuadro blanco a la sombra del líder.