El delantero céltico David Rodríguez coincidió ayer con varios de sus compañeros de equipo a la hora de reclamar tranquilidad para afrontar el importante compromiso de esta tarde ante el Córdoba. “Cada jugador interiormente piensa que es un partido que puede definirse como una final, pero ahora mismo, y el equipo está mentalizado de ello, hay que tener tranquilidad y no vale lo típico que se dice de que hay que ganar como sea, por lo civil o por lo criminal. El míster nos está enseñando el camino para conseguir la victoria, que es muy difícil de lograr en una mala racha como la que estamos atravensando”, dijo.

El artillero toledano admitió, sin embargo, que no es fácil templar los nervios en una dinámica tan negativa como la del conjunto vigués. “Si el equipo estuviera en la mitad de la tabla, todo sería mucho más fácil. Puede que haya ojos mirando la clasificación, pero el jugador debe ser profesional y mantener la cabeza fría porque es la única manera de salir de esta situación”, declaró.

David Rodríguez se resiste a calificar el duelo de esta tarde de final, pese a tratarse de un rival directo y estar en juego el coeficiente particular de goles. “Nos jugamos muchas cosas, pero no hay que obsesionarse con el partido como si fuera la final del campeonato, sino verlo como un partido más que hay que ganar porque es muy importante y sobre todo porque hay que romper la mala dinámica que llevamos”, subrayó.

El delantero centro celeste prefiere no mirar de momento resultados de terceros equipos. “Esas cuentas son como las de la lechera. Hay un objetivo, en Segunda te marcan los 50 puntos como los de la permanencia y ese debe ser nuestro objetivo, no pensar en el resto”, comentó.

David Rodríguez espera que el Celta pueda sacar partido de algunas de las ausencias del Córdoba. “Ellos tienen bajas importantes y va a ser un encuentro en el que vendrán a tratar de sorprendernos. Se va a ver un partido en el que el Celta llevará la iniciativa en el juego, que es como los jugadores nos sentimos a gusto”, observó.

El punta de Talavera de la Reina confía en que la afición apoye al equipo en estos momentos de tribulación del mismo modo que lo hizo en los últimos partidos en Balaídos. “Jugar en estas circunstancias no es fácil”, confesó David Rodríguez, que remachó: “El ritmo se aguantar físicamente el equipo está preparado, el problema es que en una dinámica negativa es difícil de aguantar esa presión. Hay que tener esa tranquilidad, saber que jugamos en casa, que vamos a tener a una afición que en los dos últimos partidos ha estado con nosotros y ha sido un jugador más y no esperar al descanso como en esos encuentros. Si salimos desde el minuto uno enganchados, conseguiremos los tres puntos seguro”.