A Eusebio le preocupa la falta de puntería del Celta, que en trece de las treinta jornadas disputadas no anotó un gol, lo que le convierte en el quinto peor equipo de Segunda División en este apartado. Ayer, el técnico vallisoletano puso a los delanteros a lanzar a portería.

Dani Abalo, Óscar Díaz, Kamel Ghilas, David Rodríguez y Dinei tuvieron trabajo extra cuando el resto de la plantilla dio por finalizado el entrenamiento. Eusebio les invitó a que ensayasen lanzamientos. “Estamos trabajando la finalización para tener más posibilidades de gol. Es importante para los delanteros que se haga este ejercicio. El míster está motivando mucho al equipo porque estamos jugando bastante bien. Seguro que saldremos de esto”, explicó Dinei sobre el trabajo específico realizado en el último tramo de la sesión de trabajo celebrada ayer en A Madroa.

El cuerpo técnico trata de mejorar cualquier detalle con el objetivo de romper cuanto antes la dinámica negativa que lleva el equipo en los últimos once partidos de Liga, en los que ha obtenido solamente cinco empates: ante Girona, Nástic, Elche, Alicante y Albacete.

En el último partido celebrado en Balaídos, ante el conjunto albaceteño, dos remates al larguero impidieron celebrar la victoria que se le resiste a Eusebio desde que se hizo cargo de la dirección técnica del Celta. A Dinei tampoco le pasó desapercibida esta circunstancia: “Fue un poco complicado. Intentamos marcar goles de varias maneras y daban en el palo. No entraban de ninguna forma. Tenemos que continuar así porque estoy seguro de que el gol acabará entrando y vamos a salir de esta situación”.

Ayer fue el día elegido por el preparador del Celta para ensayar los remates a puerta. Primero lo hizo de forma general con toda la plantilla, en un ejercicio en el que intervenían varios jugadores a la vez. El balón salía dirigido desde el centro del campo hacia los extremos, desde donde se centraba para la llegada del rematador de turno.

Cuando la jornada de trabajo tocó a su fin para la mayoría, Eusebio ordenó a los jugadores que cuentan con más opciones de formar la línea de ataque ante el Salamanca que permaneciesen en el campo de entrenamiento porque tendrían ración doble de afinación de puntería.

Al ejercicio, como al resto de la sesión, se sumó el argelino Kamel Ghilas, que la víspera se había retirado con una contusión en la pierna izquierda.

Según los servicios médicos, Ghilas tuvo “mínimas molestias” durante el entrenamiento de ayer, en el que participó “sin limitaciones”. Esperan que pueda desplazarse a Salamanca. “Mañana [por hoy] entrenará normalmente y es de esperar que no tenga problemas para estar a disposición del entrenador para el domingo”, señala Juan José García Cota, el jefe médico del Celta.

Su compañero Maris Verpakovskis, por el contrario, se ha autodescartado para la cita de mañana. No parece sentirse en óptimas condiciones tras regresar de sus dos compromisos con la selección de Letonia. De hecho, Eusebio no contó con el letón en el último ejercicio para afinar la puntería. De ella depende buena parte de las opciones del Celta de mantener la categoría.