Pepe Murcia ha empleado una notable diversidad táctica en sus quince encuentros al frente del banquillo del Celta. Hasta cuatro esquemas de juego distintos ha utilizado el cordobés con diferentes réditos y sensaciones. El dibujo más utilizado por Murcia ha sido el 4-2-3-1 con distintas parejas de pivotes. Fue el empleado durante la pretemporada y con el que el equipo arrancó la Liga. La falta de resultados, sin embargo, llevó al técnico a modificar el dibujo después de la derrota en Balaídos frente al Nástic, la tercera en tres partidos.

Durante estas tres primeras semanas el debate giró en torno al papel de Roberto Trashorras y las dificultades del técnico para definir su papel en el equipo. El preparador cordobés zanjó el debate dejando al lucense fuera de la convocatoria en el siguiente partido, disputado en Ipurua ante el Eibar.

Murcia apostó en esta ocasión por un triple pivote (4-3-2-1) formado por Renan, Rosada y Vila. El esquema se repitió de nuevo fuera de casa ante el Huesca con idéntico resultado (0-0), después de ganar en Balaìdos al Tenerife con dos pivotes y Trashorras como media punta.

La pizarra del técnico cordobés dio otro vuelco en el partido de Copa del Rey ante la Real Sociedad, donde Murcia recurrió a un esquema de tres defensas centrales. El buen desempeño general del equipo liderato por un excelente Trashorras llevó a Murcia a repetir el experimento en la _Liga ante el Elche y el Alicante, aunque con peor fortuna (dos empates) y muy pobres sensaciones futbolísticas.

Las críticas le llovieron al técnico, que llegó tocado al duelo de la novena jornada, en el Carlos Belmonte ante al Albacete. Murcia recuperó el dibujo del doble pivote y, aunque el equipo no pasó del empate, ofreció momentos de fútbol muy interesantes. Las buenas sensaciones se confirmaron con la victorias ante el Salamanca, Córdoba y Levante y no decayeron en exceso pese a los empates sin goles cedidos en Balaídos ante Rayo y Real Sociedad. Al mismo tiempo, Murcia fue definiendo el equipo tipo del Celta.

La aparatosa derrota sufrida en las Palmas propició un nuevo cambio, esta vez a un dibujo con delanteros, con el que el Celta arrolló el sábado al Zaragoza. ¿Una solución puntual? Con Murcia es difícil precisarlo aunque el cordobés no es partidario de cambiar las cosas que funcionan. Y otro dilema: ¿Dónde ubicar ahora a Trashorras y a Ghilas?