Una hazaña de medio siglo

Fue una hazaña extraordinaria. Los remeros vigueses que formaban las dos tripulaciones, muchos de ellos aún en edad juvenil, se aferraron a la épica y sorprendieron a equipos mucho más y preparados -como Náutico de Sevilla, Plus Ultra y Banco Central de Madrid, Náutico de Tarragona, Marítimo de Barcelona, Náutico de Alicante o Helios de Zaragoza- en la modalidad de remo de banco móvil en yolas a cuatro y a dos con timonel, máximos galardones de la época, para proclamarse dobles campeones de España el 15 de octubre de 1958.

Un triunfo doble sin precedentes, pues no se recordaba en la historia ningún club que hubiera ganado las dos modalidades en el mismo campeonato. El equipo de yolas a dos con timonel estaba formado por Óscar Troncoso, Matías Álvarez y José Antonio Paredes de timonel, y la yola a cuatro contaba con los remeros Adolfo Varela Donnay, Franco Cobas, Manuel Ángel Villar, Saturnino Durán y José Antonio Pérez del Olmo de timonel. Además componían la expedición los suplentes Carlos Cendón y Pepito Álvarez Rosendo, el entrenador catalán recién fichado para este campeonato, Alberto Lamarca, el delegado José Carlos García y el marinero Pepiño Piñeiro, "Sebo de Grilo".

Fue un éxito que fijó un hito en la historia del Náutico de Vigo y en el deporte vigués. En aquellos tiempos no eran frecuentes las asistencias a campeonatos de esta índole y el remo vigués vivía en una cierta orfandad y discreta trayectoria. Aquel viaje a Zaragoza en autobús con los barcos encima, atados con cuerdas, duró dos días.

Cincuenta años más tarde sus protagonistas recuerdan aquella hazaña con nostalgia y orgullo: "Creo que logramos una auténtica hazaña deportiva, como así lo reconocieron los medios vigueses y nacionales y la ciudad en pleno. Llegar a lo más alto después de largos y sacrificados entrenamientos en la Ría, bajo el frío, la lluvia y todas las inclemencias climatológicas, fue una hazaña que hoy nos sigue llenando de orgullo. Una caravana de amigos vinieron a esperarnos a Porriño y nos acompañaron en los últimos kilómetros hasta el club haciéndonos guardia de honor. La entrada en Vigo fue triunfal. Parecíamos la comitiva presidencial en la quinta avenida de Nueva York. Lo que también nos emocionó a todos fue cómo el público en Zaragoza nos aplaudía y se alegraba con nuestra victoria. Fue hermoso. Nos ganamos su simpatía al ser los más jóvenes del campeonato", comenta Franco Cobas.

Adolfo Varela Donnay también guarda un emotivo recuerdo. "Me sorprendió que la prensa nos estaba esperando y a Óscar lo entrevistaron para la radio, le dieron previamente un papel con las preguntas y respuestas que debía leer ante el micrófono". Para Manuel Ángel Villar fue "una época muy feliz y muy bonita. Cuando regresamos de Zaragoza, el secretario del club, José Ramón Fontán, nos esperó en Porriño y nos regaló a cada uno una bolla de pan de Porriño".

José Antonio Pérez Del Olmo opina que "lo más bonito de nuestros recuerdos es que ahora todos juntos podemos volver a rememorar aquella época y aquella hazaña, después de cincuenta años". Para Carlos Cendón "lo más bonito es volver a estar ahora aquí reunidos y felices reviviendo momentos inolvidables."

Un deporte solidario

Coincide con Óscar Troncoso: "El remo es un deporte solidario en donde si falla uno se rompe el equipo. De aquellas épocas, lo que más recuerdo, es que practicábamos el remo sin patrocinadores, ni subvenciones, ni ninguna rentabilidad económica. Además es un deporte que muchas universidades del mundo lo han incluido entre sus materias como un deporte de formación inigualable precisamente por esas virtudes de deporte anónimo en que el individuo forma parte de un equipo."

Por su parte, Matías Álvarez atribuye el éxito a la labor de todo el grupo, "esta es una labor de equipo donde no hay individualidades. Y ahora lo más bonito es que nosotros pongamos en nuestras "paladas" también el afán para que esto siga adelante. Que continúe el deporte y que las futuras generaciones que lo sigan haciendo, y si es posible, mejor de lo que lo hicimos nosotros", dice nostálgico.

Finalmente, José Luis Méndez indica que "una de las mejores cosas que he hecho en mi vida ha sido venir al Náutico, por el compañerismo, el deporte que hacíamos, la amistad y sobre todo aquella juventud sencilla y con más ambiciones que posibilidades, que no creo que se haya repetido desde entonces."

Resultados:

Final Yolas a Dos con Timonel: 1. Real Club Náutico de Vigo, 9.19:2; 2. Club Náutico Tarragona, 9.34:3; 3. Club Regatas Alicante, 9.44:0.

Final Yolas a Cuatro con Timonel: 1. Real Club Náutico de Vigo, 8.08:4; 2. Club Regatas de Alicante, 8.15:5; 3. Plus Ultra de Madrid, 8.16:0.