Francisco Prada Gayoso y Carlos Pérez-Bouzada se personarán hoy en el Juzgado de lo Mercantil Número 1 de Pontevedra para tomar posesión de su cargo como administradores concursales del Celta. Ambos fueron designados la víspera por la jueza Aurelia Montenegro, encargada del caso, para supervisar la administración del club en el auto en el que se declara al Celta en proceso concursal. El tercero de los interventores debe ser designado en las próximas horas por Hacienda, a quien la jueza ha designado como representante de los acreedores.

Tanto Francisco Prada como Carlos Pérez-Bouzada declinaron ayer realizar declaraciones al no haber aceptado aún sus cargos y no haberse formalizado, por tanto, su condición de supervisores (no gestionarán el club pero darán el visto bueno o revocarán sus decisiones) del Celta. Los dos señalaron, de hecho, que sabían más del asunto por los medios de comunicación que por el propio juzgado, que les notificó ayer su nombramiento. Una vez que hayan aceptado sus cargos, los tres administradores se desplazarán hasta la sede social del Celta para solicitar la documentación que deben examinar a lo largo de los próximos meses.

Por otra parte, el club dio ayer por primera vez señales de vida y confirmó, 24 horas después de que lo hiciese el juzgado, la declaración de proceso concursal. En nota en su página web, el Celta justifica su decisión de acogerse a la Ley Concursal como "la única salida para evitar la desaparición". En un tono sumamente optimista, el club añade: "El Celta prevé incluir en el proceso un plan de viabilidad que permitirá, si las instituciones colaboran, salvar al club, sanearlo y situarlo en una situación económica envidiable en España dentro de unos años".