El lateral brasileño Daniel Alves fue presentado ayer como jugador del Barcelona y como "el mejor del mundo en su posición", en palabras del presidente del Barça, Joan Laporta, y el secretario técnico Txiki Begiristain, que justificaron el coste del traspaso, que convierte a Alves en el defensa más caro de la historia del fútbol español.

El Sevilla, que pagó medio millón de euros por el fichaje de Alves hace seis años cuando llegó del Bahía, percibirá una cantidad fija de 29,5 millones de euros a los que se sumará una variable de hasta seis millones en función de la clasificación y los títulos del equipo, lo que podría elevar a 35,5 millones el coste del traspaso para el Barça.

Alves, por su parte, se estrenó con unas palabras en catalán para mostrar su alegría por llegar al Barça y espera tener "la misma fortuna" que en el Sevilla y conseguir títulos como la Liga y la Liga de Campeones, que sumaría a las dos Copas de la UEFA, una Copa del Rey, una Supercopa de Europa y otra de España que ya tiene.

"Vengo al mejor club, un club que quiere volver a ser lo que era hace dos años, y es un honor que cuenten conmigo", declaró el brasileño, que aspira a ganar la Liga y la 'Champions'. "Es un objetivo personal que tengo, he firmado por cuatro años y en este tiempo quiero conseguirlos", concluyó.

Las bajas, un problema

El secretario técnico, Txiki Begiristain, explicó que existen dificultades para los traspasos de Ronaldinho y Eto'o debido a las pretensiones económicas de ambos jugadores y dijo que "es difícil porque pocos clubes en el mundo pueden pagar esas cantidades", en alusión a sus fichas en el Barça.

Begiristain también apuntó que "les está costando llegar a acuerdos con los clubes" y que el Barcelona les ha dado permiso para negociar contratos con otros equipos y está a la espera de que alcancen un acuerdo, siempre que el club de destino ofrezca también una cantidad satisfactoria para el Barcelona. Sobre Ronaldinho aseguró que si se quedase "cogerá la forma si se entrena con responsabilidad".