Jesús Perera se muestra agradecido a la afición por no haber dado la espalda a un equipo que ha defraudado sus expectativas y asume las críticas de la hinchada como una consecuencia lógica de una temporada fracasada. "A la gente no se le puede achacar nada. Los que van están en todo su derecho de criticar al equipo porque lógicamente no ha cumplido con las expectativas. A los pocos que van hay que darle las gracias por apoyar al equipo incluso en los malos momentos pero no podemos pedirles que nos aplaudan", reconoce. El delantero espera al menos corresponder a la desencantada hinchada celeste con dignidad profesional. "Debemos mostrar actitud y defender un escudo que es el Celta. Porque más allá de que las cosas vayan mal, por detrás hay un club que nos está pagando y nuestra obligación es ser profesionales", dice Perera, que no elude la autocrítica: "Desde que empecé a jugar he intentado hacer goles y que el equipo ascendiera, pero hemos fracasado y yo me siento responsable de este fracaso por la mala racha que cogí cuando no tenía que haberla cogido".