1 - Liverpool

Reina, Arbeloa, Carragher, Skrtel, Aurelio (Riise, m.61), Kuyt, Alonso, Mascherano, Babel (Benayoun, m.76), Gerrard, Torres.

1 - Chelsea

Cech; Ferreira, Carvalho, Terry, Ashley Cole, Lampard, Makelele, Ballack (Anelka,m. 85), Joe Cole (Kalou, m.63), Drogba, Malouda.

Goles: 1-0, m.42: Dirk Kuyt, 1-1, m.90: John Arne Riise, en propia meta.

Árbitro: Konrad Plautz (Austria). Sacó tarjeta amarilla a Makelele, del Chelesa.

Incidencias: Primera eliminatoria de las semifinales de la Liga de Campeones, disputada en el estadio de Anfield, ante unos 42.182 espectadores.

Liverpool y Chelsea empataron a uno en la ida de las semifinales de la Liga de Campeones, en un partido en el que el equipo local se mostró superior, pero un gol en propia puerta en el último minuto castigó el exceso de ocasiones desperdiciadas.

Los de Rafa Benítez se adelantaron al filo del descanso y dispusieron de varias ocasiones para aumentar la renta frente a un Chelsea que careció de brillantez en ataque y continuidad en su juego. El Liverpool perdonó demasiado y recibió el castigo en el minuto 94, cuando Riise despejó a su propio marco un peligroso centro de Kalou en una acción en la que el Liverpool pareció relajarse en exceso al entender que el partido estaba terminado.

El Chelsea se mostró superior durante los primeros minutos. Los hombres de Avram Grant no sólo volvieron a exhibir su habitual solvencia defensiva, sino que se desenvolvieron con mayor comodidad en las posiciones más avanzadas y combinaron con mayor peligro entre los hombres de arriba.

Sin embargo, el Liverpool hizo valer su condición de anfitrión y poco a poco fue ganando presencia sobre el terreno de juego. Fruto de esta nueva situación, los de Rafa Benítez comenzaron a mover el balón en busca de algún hueco en la defensa rival, pero la seriedad atrás del Chelsea impidió en todo momento que el Liverpool llegara al área contraria con el balón controlado. Torres tuvo una ocasión inmejorable para inaugurar el marcador. Sin embargo, el ariete madrileño se topó con Peter Cech.

En la siguiente ocasión de gol, el Liverpool no perdonaría. Tras una jugada embarullada, Mascherano logró enviar un pase elevado a la espalda de la defensa contraria y Kuyt, que defendió muy bien su posición, batió por bajo a Cech. De esta forma, los "reds" consiguieron el premio al asedio protagonizado en la recta final de la primera parte. Alentado por el tanto, el Liverpool salió volcado al ataque para sentenciar el partido tras la reanudación. Los "reds" buscaron en el comienzo de la segunda mitad un gol que les pusiera de cara la eliminatoria, pero la insitencia de Babel, que hizo valer su explosividad ante Paulo Ferreira, no encontró la merecida recompensa. Tardaría en hacerlo el Chelsea, que disfrutó durante el ecuador de la segunda parte de sus mejores ocasiones. Lampard primero y Malouda después dieron los mayores avisos de peligro a un Liverpool que reaccionó con coraje y tuvo el 2-0 en remates de Gerrard y de Torres que se encontraron con Cech. Pero entonces, cuando pasaban cuatro minutos del tiempo, llegó un centro de Kalou y un error imperdonable de Riise.